La Habana, 21 ene.— Unos 66 mil 291 millones de pesos en ingresos brutos totales prevé el Presupuesto del Estado del actual año, lo cual representa un 11,5 por ciento de crecimiento, y aún así son significativas las reservas en manos de los actores económicos para lograr mayores aportes, afirmó hoy Vladimir Regueiro Ale, viceministro primero del Ministerio de Finanzas y Precios (MFP).
En conferencia de prensa en la sede del organismo, en la capital, Regueiro Ale destacó que ese incremento se corresponde con la meta de aumentar los niveles de circulación mercantil minorista a partir de más ofertas a la población, de la extracción de la liquidez necesaria que permita un adecuado equilibrio monetario-financiero y genere altos ingresos a favor de los presupuestos locales.
Por ello se maximiza su recaudación, se mantienen restricciones en los llamados gastos corrientes de la actividad presupuestada y no presupuestada, se prioriza el uso y destino de los gastos, y se insiste en el principio del ahorro como premisa de hacer lo mismo o más, con calidad, con menos o igual financiamiento, manifestó el funcionario.
Aclaró que las modificaciones para incrementar gastos solo darán respuesta a ajustes del Plan de la Economía, niveles de actividad aprobados y a decisiones del Gobierno Central, además de insistir en la necesidad del análisis mensual pormenorizado, partida a partida, del Presupuesto con base en los estados financieros, para la toma oportuna de decisiones en los territorios y entidades.
Pero no basta con el crecimiento sustancial en la circulación mercantil minorista, sino que también urge potenciar la eficiencia empresarial, especialmente en el sector estatal pues garantiza el 85% de los ingresos totales, cumplir los ingresos tributarios los cuales representan el 74 % de las recaudaciones, y una estricta disciplina en los aportes mensuales por los actores económicos, que garantice la liquidez oportuna.
En opinión del viceministro primero de Finanzas y Precios entre las tantas reservas o aspectos que pueden contribuir a mayores recaudaciones está eliminar los atrasos en la presentación de las declaraciones juradas y en el pago de los impuestos sobre utilidades y sobre ingresos personales al cierre del año.
A ello se suma la acumulación de una deuda de mil 100 millones de pesos pendientes de cobro, el incumplimiento de pagos y evasión por subdeclaración de ingresos de impuestos asociados a transmisiones de viviendas y autos entre particulares, y el bajo nivel de enfrentamiento al ejercicio ilegal de actividades económicas, pues ocasionan pérdidas recaudatorias para los presupuestos municipales.
Este año se impone trabajar también por captar en el país 34 millones de pesos que corresponden a multas fuera de término de pago, por dinamizar las gestiones comerciales y de ventas, incluyendo inventarios ociosos y de lento movimiento, y por incrementar el control del efectivo, en especial en las empresas de comercio y gastronomía.
Eliminar cadenas de impagos que afectan la liquidez, estimular la gestión de ingresos por las unidades presupuestadas prestadoras de servicios como museos, galerías e instalaciones deportivas, movilizar las reservas en los pagos de la Contribución Territorial por los establecimientos de empresas y formas cooperativas, y elevar el control en su asignación y empleo, son otros retos en el 2020.
En la conferencia de prensa, en la que intervino además, Maritza Cruz García, viceministra del organismo, se insistió en que como parte del recrudecimiento del bloqueo norteamericano este año estarán presentes tensiones financieras y limitaciones materiales, en particular las dificultades en el abastecimiento de combustible.
Por tanto, estarán también en las prioridades del MFP la batalla por la eficiencia en los procesos productivos y de servicios, las utilidades empresariales como consecuencia de ese imperativo y de los niveles de actividad del Plan de la Economía, los aportes de las formas de gestión no estatal, y la ejecución de un grupo de medidas tributarias.
Y una vez más los recursos financieros que integran el Presupuesto del Estado garantizan la prestación de los servicios básicos de educación, salud, cultura, deportes, comunales, entre otros destinados a la población, así como la defensa del país, el orden interior y la implementación de políticas sociales aprobadas.
Una de estas es la continuidad del incremento parcial del salario en el sector presupuestado y de las pensiones de la Seguridad Social.
