La Habana, 7 dic.— Cuba conmemora hoy el aniversario 30 de la Operación Tributo, por la cual fueron trasladados a territorio nacional, en 1989, los restos de compatriotas caídos en misiones internacionalistas.
Ese día los dos mil 85 militares y 204 civiles que ofrendaron sus vidas en la gesta emancipadora de Angola, fueron sepultados en la tierra que honraron con su sacrificio, donde reciben perenne homenaje, junto a los que lo hicieron en otras latitudes.
La fecha coincide con la de la caída en combate del segundo jefe militar del Ejército Libertador de Cuba, el Mayor General Antonio Maceo, y su ayudante Panchito Gómez Toro, y es Duelo Nacional.
En la ceremonia de inhumación de los caídos en Angola, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, afirmó: el 7 de diciembre se convertirá en día de recordación para todos los cubanos que dieron su vida no solo en defensa de su Patria, sino también de la humanidad.
De este modo, agregó, el patriotismo y el internacionalismo, dos de los más hermosos valores que ha sido capaz de crear el hombre, se unirán para siempre en la historia de Cuba.
Así ha sido desde entonces; en cada municipio de la isla se recuerda a Maceo y a los integrantes del Ejército Libertador, y a la desinteresada y decisiva participación de los cubanos en la lucha por la independencia de Angola y Namibia, y contra el apartheid, que posibilitó el nacimiento de una nueva Sudáfrica.
Como es ya tradición, en todos los municipios del país se colocarán flores en los panteones erigidos a los caídos, luego de una peregrinación, en acto solemne de recordación.
Ese tributo adquiere especial significado hoy en un contexto donde la colaboración de Cuba con otras naciones, inspirada en la vocación internacionalista de sus próceres, es víctima de una campaña de descrédito impulsada desde Estados Unidos, como parte de los intentos por destruir a la Revolución.
