La Habana, 9 may.— Al cumplirse hoy cien años del natalicio de la heroína de la Revolución Celia Sánchez, en Cuba se le recuerda como un paradigma de la vocación humanista del proceso de transformaciones sociales que adelanta la nación.
Su profunda sensibilidad la impulsó a integrar las filas del Movimiento 26 de Julio, encabezado por Fidel Castro, en la organización de la lucha en la clandestinidad primero, para convertirse posteriormente en la primera mujer combatiente del Ejército Rebelde en las montañas de la Sierra Maestra.
Tras el triunfo revolucionario del 1 de enero de 1959, desempeñó múltiples responsabilidades como las de Secretaria del Consejo de Estado y diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular, y dejó su impronta en numerosos programas sociales y proyectos de desarrollo nacional.
La víspera de su centenario, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, evocó su recuerdo y resaltó la vigencia de su ejemplo: Cuba rinde homenaje a su amada memoria. Ella va junto a cada compatriota que lucha contra la pandemia, dentro y fuera de Cuba, escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.
Ella vive en cada acción de la Revolución de los humildes y para los humildes. Celia es Cuba, agregó.
En otro mensaje el jefe de Estado cubano escribió: Viva en su centenario Celia de los Desamparados Sánchez Manduley, la muchacha que puso a Martí en el pico más alto, la heroína del llano y la Sierra, custodio de nuestra memoria, protectora de los hijos de la Patria, fiel asistente de Fidel y vigía de la belleza.
Por su intensa vida revolucionaria, humildad, y consagración a la causa emancipadora de Cuba, Celia Sánchez fue denominada por Fidel Castro como la flor más autóctona de la Revolución.
