Autor: Wennys Díaz Ballaga
«Esta ha sido una auténtica asamblea del pueblo, porque sus debates fueron los debates de la sociedad cubana hoy», expresó a los diputados el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al clausurar el v Periodo Ordinario de Sesiones del Parlamento cubano en la x Legislatura.
En presencia del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución, Díaz-Canel afirmó que los debates reflejaron los enormes desafíos que tenemos por delante, pero también, una vez más, la impresionante disposición de este pueblo a pelear cuando todo se pone más difícil. «Ni pesimismo, ni derrotismo, ni desánimo», aseguró.
Si, a pesar de todas las circunstancias, las pasadas y actuales, «la Revolución Cubana está de pie y luchando con la prosperidad posible, es por su carácter auténtico y genuino. No somos un accidente de la historia. Somos la lógica consecuencia de una historia de resistencia y rebeldía contra el abuso y la injusticia, que tiene razones muy profundas para creer en sus propias fuerzas», afirmó.
Sobre el desarrollo del país –dijo– el principal obstáculo no está a nuestro alcance eliminarlo de forma directa, «todas las soluciones dependen por entero de nuestra capacidad de prever, de adelantarnos a los acontecimientos y de enfrentarlos con inteligencia, esfuerzo e innovación. Pero, primero que todo, con la imprescindible participación popular».
Trascendió además, en esta sesión, la aprobación de una reforma constitucional que elimina el límite de 60 años de edad para ser elegido Presidente de la República en su primer mandato.
Además, fueron aprobadas las leyes Del Registro Civil, Del Sistema Deportivo Cubano y el Código de la Niñez, Adolescencias y Juventudes, y el Gobierno del Poder Popular de Camagüey rindió cuentas de su gestión en el cumplimiento del Programa de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía.
