Por Ventura de Jesús
Matanzas.— Luego de sincronizar el sábado con el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), la Guiteras debió parar sus máquinas por una falla en la caldera, ocurrida alrededor de la una de la tarde del martes.
Explicó el ingeniero Rubén Campos Olmos, director general de la Termoeléctrica, que durante esta parada imprevista, además de solucionar la avería en caldera, continuarán con los trabajos de ajustes en el área de la turbina, concretamente en las chumaceras tres y cuatro.
Precisó que se trata del llamado proceso de reglaje, una actividad habitual después de realizar labores de mantenimiento en dicho espacio.
El objetivo es lograr que la diferencia de temperatura entre los puntos que se miden en esa sección esté por debajo de los 15 grados, subrayó.
Dijo que, tras el necesario periodo de enfriamiento de la planta, trabajadores y especialistas de la Empresa de Mantenimiento a Centrales Eléctricas (EMCE) y operadores de la propia unidad laborarán en ambas áreas, hasta que la máquina esté lista para operar.
En el caso de las acciones en la turbina, el directivo opinó que es una labor bien compleja, que requiere de mucho esfuerzo, pues tiene que ver con mecánica de alta precisión.
La Antonio Guiteras estuvo en mantenimiento a lo largo de más de 90 días, periodo en el cual se realizó un significativo número de mejoras al bloque unitario, cuyo aporte es importante para la capacidad de generación del país.
Ante la lógica preocupación que suscita la salida de esta planta, expertos insisten en que, tras un mantenimiento prolongado, es común efectuar reiterados ajustes, hasta obtener la deseada estabilidad.
Con independencia de este último inconveniente, el colectivo de la Guiteras sostiene el propósito de mantener la planta generando permanentemente en la etapa veraniega, cuando es mayor el consumo de electricidad.
Según expertos, los trabajos para ponerla en línea otra vez demandan de siete u ocho días.