Con la autoridad que le concede ser ejemplo de solidaridad internacional, Cuba invocó, en la 5ta. Conferencia Mundial de Presidentes de Parlamentos, celebrada en Austria, la necesidad de una cooperación más estrecha entre los países para enfrentar la pandemia.
Ana María Mari Machado, vicepresidenta de la Asamblea Nacional del Poder Popular, destacó cómo Cuba concibe la salud como un estado de bienestar físico, mental y social, y no solamente como la ausencia de afecciones o enfermedades y, por tanto, es un derecho humano fundamental y una responsabilidad del Estado.
Resaltó la capacidad científica del archipiélago para crear sus propias vacunas anti-COVID-19, las cuales permitirán inmunizar a toda su población antes de finalizar el año.
Mari Machado denunció cómo, a contracorriente del espíritu colaborativo que urge en el mundo, el Gobierno de Estados Unidos recrudeció la política de bloqueo económico contra la Isla, a fin de impedir el acceso a combustibles, a divisas internacionales e, incluso, a alimentos, medicamentos e insumos médicos.
También agradeció el apoyo material recibido en Cuba desde varios países, y sentenció que la salud de los pueblos es una condición fundamental para lograr el desarrollo. (Lisset Chávez)
