La Habana, 19 ago.— Agosto entra en la recta final y, también, Zona Joven, segunda etapa del proceso orgánico del XI Congreso de la juventud cubana y su vanguardia política, la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), convocado para principios de abril de 2020.
En declaraciones a la prensa, Susely Morfa González, primera secretaria de la UJC, no escatimó elogios a la hora de evaluar el desarrollo de este
importante paso de los preparativos, concebido como un espacio de movilización, participación y aporte juveniles en la comunidad.
Nuestras bases están en los colectivos laborales y estudiantiles, pero la organización no tiene estructuras en los barrios y es justo ahí, donde más nos cuesta llegar, que hemos estado y actuado desde mediados de junio, y principalmente durante julio y agosto, con cada Zona Joven, en total más de 900 en Cuba entera, afirmó.
Ha sido, sí, un espacio de participación, expresión de un compromiso real, consciente y muy a tono con la divisa del XI Congreso:” Tu futuro, hoy”, que es un llamado a todos los jóvenes, militantes y no militantes, a hacer por Cuba, significó la también miembro del Comité Central del Partido y del Consejo de Estado.
Nuestro tiempo es este, no mañana ni después; el porvenir es ahora, se hace y se decide hoy, y porque es nuestro, construirlo desde este presente constituye una misión de la juventud, recalcó Morfa González.
Cada territorio seleccionó los escenarios y a partir de una caracterización y tras un diagnóstico y la identificación de las prioridades, fueron definidas las acciones, tan disimiles como las necesidades de las propias comunidades, explicó.
Habló de Zona Joven como espacio de intervención comunitaria, de movilización para labores que precisan de brazos jóvenes, lo mismo la terminación de un parque infantil, que el apoyo a algunos de los tantos objetos de obra en La Habana a propósito de sus 500 años o, simplemente, a una pareja de ancianos que ha recibido un subsidio para reparar su vivienda.
Muchísimas han sido las acciones e iniciativas, hemos visto a estudiantes universitarios y del nivel medio superior de enseñanza presentar proyectos en el barrio, y también a jóvenes desvinculados del estudio y el trabajo sumarse a este torbellino y hasta hacerse de un empleo o de un curso de superación o adiestramiento, añadió.
Las necesidades y, sobre todo, la naturaleza y complejidad de las acciones, han determinado la duración de cada Zona Joven y el número de participantes, pero, eso sí, todas se despiden con variadas propuestas culturales, deportivas y recreativas para los niños, adolescentes, jóvenes y pobladores en general, puntualizó.
La Primera Secretaria de la UJC calificó de sumamente útil esta experiencia, que ha “prendido” y dado frutos, y destacó que en los sondeos de opinión acerca de las actividades del verano, la población ha reconocido la valía de este esfuerzo, lo ha agradecido y señala que debe mantenerse.
Y es que la comunidad necesita de sus jóvenes y debe estar, cada vez más, en el radio de acción de la Juventud Comunista y sus organizaciones de base, enfatizó Morfa González, y agregó que lo vivido en estos meses demuestra la necesidad de sistematizar empeños como este, y permite afirmar que Zona Joven llegó para quedarse.
El siguiente paso en el proceso orgánico del XI Congreso de la UJC serán las asambleas municipales y distritales -178 en total- , que ocuparán los meses de septiembre a noviembre próximos, mientras en enero y febrero de 2020 serán las provinciales, y las sesiones finales tendrán lugar en La Habana del dos al cuatro de abril. (María Elena Álvarez Ponce)
