Duelen los rumores sobre la muerte y las desgracias humanas; pero lastiman más cuando estos se convierten en una triste realidad, clavando un puñal en lo más hondo del alma y los pensamientos sanos.
Dos mujeres han sido abatidas este 7 de noviembre de 2020 en el Distrito José Martí de la Ciudad Héroe a plena luz de este noviembre lluvioso, ante las miradas aterrorizadas de varios habitantes que corrieron al instante y, otros, inmóviles.Siendo las 8.00 am de este 7 de noviembre de 2020, en la parada de ómnibus de Micro 9, en el Distrito José Martí de la ciudad de Santiago de Cuba, un ciudadano se acercó a dos damas que se encontraban en el lugar, extrajo un arma de fuego y le disparo a ambas. La primera quedó occisa en el lugar; mientras la otra fue trasladada inmediatamente al Hospital Provincial Saturnino Lora. Cuando los médicos se disponían a iniciar la cirugía de urgencia falleció en el salón. Ninguna de las víctimas superaba los 27 años de edad.
El perpetrador de este violento hecho se dio a la fuga. No obstante, se desplegó en todo el lugar un dispositivo policial y unos minutos más tarde fue detenido durante la huida ocupándosele el arma homicida. Un grupo multidisciplinario del Ministerio del Interior, investiga los hechos.
Hasta el momento se ha confirmado que este ciudadano tenía relación de familiaridad con las dos fallecidas. Es real el crimen y se sufre porque en Cuba las armas de fuego no constituyen una cuestión descontrolada; porque las mujeres han ganado un espacio de respeto y de igualdad en nuestra sociedad; y porque en la defensa de los derechos de la mujer cubana el Estado ha implementado proyectos, iniciativas creadoras, leyes y un sistema de tratamiento individual y grupal para proteger a las féminas.
¡Falta mucho, sobre todo en ganar conciencia colectiva de que no hay sexo débil y sí muchas flores que cuidar!En 2019, Cuba hizo pública en Naciones Unidas que la tasa de feminicidios por cada 100 000 mujeres era de 0,99, mediante un informe nacional para la Implementación de la Agenda 2030. Valdría la pena actualizar este dato con el fin de saber cuánto hemos ganado o perdido en la gestión de protegerlas.
Llegue mis condolencias a los familiares y amigos de las víctimas. ¡Qué se haga sentir la justicia con imparcialidad y rectitud! Estos actos merecen el repudio público. Me son abominables. Ningún hombre está falcultado para dañar la integridad física y moral de una mujer por motivos de odio, desprecio, placer o sentido de propiedad. Es TRISTE lo que ha ocurrido en mi heroica Santiago este 7 de noviembre.
