La estación de bombeo de Laguna Blanca, ubicada en el mayor polo productivo de Santiago de Cuba, sufrió severos daños tras el paso del huracán Melissa. La crecida del río Mandarina provocó el taponamiento de unos 20 metros de su infraestructura, afectando directamente el suministro de agua para el riego y la producción agrícola de la zona.Ante la magnitud de los daños, el vice primer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca chequeo las acciones inmediatas que se ejecutan para restablecer el funcionamiento de la estación y garantizar la continuidad de la producción en el territorio.