Ramala, 9 ago.— La Oficina de Medios de Comunicación del Gobierno en Gaza acusó hoy a Israel de cometer crímenes de guerra y contra la humanidad en ese territorio palestino.
El director general de la institución, Ismail al-Thawabta, afirmó que ese país obstruye la entrada de ayuda humanitaria a organizaciones internacionales, en especial del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (Unrwa).
En una entrevista con la agencia noticiosa Shebab, el funcionario estimó que el gobierno de Benjamín Netanyahu tiene como objetivo paralizar la capacidad de Unrwa y de la ONU para llevar a cabo sus misiones de socorro en Gaza.
Las autoridades de esa nación intentan debilitar a cualquier parte neutral que goce de la confianza de la población y buscan reemplazarla con alternativas que carecen de principios humanitarios, advirtió.
“Los alimentos y las medicinas se convirtieron en armas en la guerra de la ocupación (Israel) contra la población civil”, criticó.
Al-Thawabta reclamó la reapertura de los cruces fronterizos, el establecimiento de un corredor humanitario, el fin de la política de hambruna y la necesidad de llevar ante los tribunales a los dirigentes israelíes por sus crímenes.
Esta semana el funcionario también acusó a la vecina nación de impulsar un proyecto de “ingeniería deliberada del caos y la hambruna”, como parte de un plan para reocupar el territorio y expulsar a su población.
En declaraciones a la Agencia de Noticias Safa, cuestionó los sistemáticos ataques militares contra el personal de seguridad en la Franja, que consideró un intento de perturbar cualquier esfuerzo para proteger los convoyes de ayuda y asegurar su entrega a los necesitados.
El objetivo es socavar cualquier plan de control civil sobre la situación humanitaria y reemplazar a las autoridades responsables por bandas de saqueadores y sus agentes para facilitar así el robo de la ayuda y distorsionar la imagen de la sociedad palestina, subrayó.
Además, criticó los intentos israelíes de demonizar cualquier esfuerzo nacional para asegurar los alimentos y medicinas que son enviados al territorio por países, Organizaciones No Gubernamentales y Naciones Unidas.