Autor: Luis Alberto Portuondo
Santiago de Cuba.– Aunque con décadas de implementación en Cuba, y notables resultados, la realidad sensible y compleja que constituye el déficit de medicamentos hace del Programa de la Medicina Natural y Tradicional (MNT) la más viable alternativa para satisfacer, en la medida de lo posible, tan perentoria necesidad.
Esta práctica, tan antigua como las enfermedades mismas, ha demostrado ser muy eficiente para combatir los dolores, la constipación, el insomnio y una larga lista de afecciones con las que lidiamos casi a diario.
No es una alternativa excluyente a la llamada medicina convencional, más bien es un complemento que aporta beneficios adicionales, reconocidos por la Organización Mundial de la Salud.
EN CUBA, LA SALUD DEL PUEBLO ES LO PRIMERO
En la Mayor de las Antillas, la aplicación de la MNT se fundamenta en el uso histórico y las investigaciones científicas, cuyos resultados son integrados al Sistema Nacional de Salud. Bajo otros preceptos, pero con el mismo fin: aliviar dolores y curar, la utilizaban los aborígenes.
Desde la llegada de los europeos y la posterior introducción de prácticas curativas procedentes de África y Asia, el empleo de las plantas medicinales –y las formulaciones que de ellas se derivan– es un método tradicional y asequible, tanto para prevenir como para enfrentar diversas dolencias.
Para consolidar ese acervo, la MNT abarca 11 modalidades: Acupuntura y técnicas afines, Fitoterapia, Apiterapia, Ozonoterapia, Terapia floral, Homeopatía, Ejercicios tradicionales chinos, Helio-talasoterapia, Hidrología médica, Orientación nutricional naturista y Medicina ayurvédica.
En la provincia de Santiago de Cuba, varios organismos e instituciones –entre los que se destacan la Universidad de Oriente, la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas, Laboratorio Farmacéutico Oriente y la Universidad de Ciencias Médicas– apuestan por impulsar su uso, que incluye modalidades, técnicas y procedimientos preventivos, diagnósticos, terapéuticos y rehabilitadores, muy oportunos para preservar y mejorar la salud.
Sobre todo, es la mejor alternativa ante la imposibilidad –que dicta el bloqueo estadounidense– de adquirir las materias primas fundamentales que permitirían elaborar el cuadro de medicamentos básicos del país.
En ese sentido, la Empresa de Farmacias y Ópticas de la provincia indómita es vanguardia en la investigación, producción y comercialización de medicamentos elaborados a partir de masa verde, y la segunda productora del país, detrás de La Habana.
En este año ha planificado producir 11 millones de frascos, garantizando 105 variedades pertenecientes al cuadro básico de medicamentos consumidos por la población cubana.
La empresa tiene cuatro centros de producción ubicados en los municipios de Songo-La Maya, San Luis, Palma Soriano y Contramaestre, que suplen la demanda de sus respectivos territorios. «En el caso de aquellas localidades que no cuentan con uno, es asumida por la Empresa Provincial», dijo a Granma Yanela Blanco Vega, directora general.
La entidad cuenta «con 28 farmacias con dispensarios en los que se asegura la venta de productos especializados según las guías y manuales establecidos para la fabricación, distribución y uso de fitofármacos y apifármacos, siendo nuestros productos líderes la fricción de muralla y jarabes anticatarrales», agregó.
Es destacable que el encadenamiento productivo con el Laboratorio Farmacéutico Oriente –perteneciente a BioCubaFarma– posibilita que, a partir de extractos fluidos como la caña santa, la pasiflora, la caléndula y el anamú, se elaboren tabletas de gran demanda por parte de la población.
«La caña santa es el primer producto que logramos materializar y ya se comercializa, es un antihipertensivo muy efectivo», alegó Georgina Igarza, especialista de la empresa.
«TRATAMOS ENFERMOS, NO ENFERMEDADES»
Salvador Blanco Rosell –diagnosticado con neurosis de ansiedad–, sufría caída de cabello causada por las crisis, hasta que, con la aplicación de tinturas naturales de jengibre y la auriculoterapia, en «solo diez días mi pelo comenzó a salir; estoy muy agradecido con el personal de la Sala de Rehabilitación del Policlínico Docente Ramiro Betancourt Betancourt, de Palma Soriano», expresó el paciente.
En la mayoría de las salas de rehabilitación se practican diariamente las técnicas de MNT. Según la enfermera Norka Tabarcia Rodríguez, diplomada en MNT, se realizan «digitopuntura, moxibustión y ventosaterapia, con mucha aceptación y magníficos resultados.
«Utilizamos mucho el ajo, para sustituir medicamentos que, por sus características químicas y la acción que ejercen sobre la enzima niacina, pueden dañar directamente el sistema digestivo, la piel y el sistema nervioso».
Con la auriculoterapia –técnica que estimula determinados puntos situados en el oído para aliviar el estrés, la ansiedad, el insomnio, la depresión, los vértigos o el lumbago– son fehacientes los resultados.
Un principio que se tiene muy presente, a decir de Tabarcia Rodríguez, «es que nosotros tratamos enfermos, no enfermedades: hay pacientes que tienen su patología de base, pero lo que asistimos acá con métodos tradicionales son los síntomas, ahí está la eficacia de la Medicina Natural».
Marilín Mayeta Govea, especialista en Medicina General Integral y máster en MNT, especificó que «la terapia floral, la homeopatía, la fitoterapia, la acupuntura, la moxa, la siembra de cactus y la ozonoterapia son muy aceptados.
«Esto llegó para quedarse, es la más inocua para el paciente y, en comparación con otros tipos de tratamiento, es la que menos daños colaterales da al organismo».
Kenia Collazo, quien recibe tratamiento con ozonoterapia y acupuntura, refirió que «en solo tres semanas vi los resultados; entré aquí con muchos dolores, pero el equipo médico ha sido muy efectivo, y la medicina natural es la mejor».
DE TODO Y PARA TODOS
Asociado a los usos que se les da a las plantas, para hacer té o infusión, se desarrolla el proyecto sectorial Fitoquímica farmacognosia de productos naturales empleados en la MNT en comunidades de la cuenca San Juan, en el municipio cabecera.
Confluyen el Centro Oriental de Biodiversidad (Bioeco), la Universidad de Oriente, la Empresa Flora y Fauna, el Ministerio de Salud Pública, la Agencia de Medio Ambiente, la Dirección de Deportes y el Centro Oriental de Ecosistemas.
Según Gustavo Polanco Durán, jefe del proyecto e investigador de Bioeco, «realizamos entrevistas a los pobladores para conocer cuáles son las plantas que utilizan, lo que conocen por beneficios, su modo de empleo y otras cuestiones aprendidas de la sabiduría popular, para luego enriquecerlos con los datos de la ciencia».
Para Regina Mercedes Rivera Odio, jefa del programa de MNT en la provincia e integrante del proyecto, los resultados se deben a la integración de «las partes productiva y asistencial, cumpliéndose todos los indicadores y propósitos que tiene el país, tanto en atención primaria, a través de las consultas y servicios integrales, como en los hospitales».
Ladys Marian Arias Cosme y Jean Rafael Guerra Romero, ambos doctores en Medicina y residentes de primer año en la especialidad de MNT, en el Hospital Dr. Juan Bruno Zayas, conocen muy bien las ventajas e importancia del empleo de estas técnicas para el tratamiento de los pacientes. No obstante, saben también de obstáculos y dificultades para el mejor desempeño de su labor.
Los jóvenes galenos coinciden en que la mayor dificultad radica en la indisponibilidad del local que anteriormente ocupaba esta consulta, «desde noviembre pasado en espera de reparación, y ahora estamos en el Departamento de Drogas, pero no podemos llevar a cabo todas las técnicas, puesto que el clima no es el adecuado», comentó Arias Cosme.
