Durante el año 2023 se registró actividad sísmica en todo el territorio nacional y mares adyacentes, aunque el mayor número de eventos estuvo asociado a la falla Oriente, situada al sureste de Cuba, que constituye la principal estructura sismo-generadora que coincide con el límite entre las placas de Norteamérica y del Caribe. Le sucedieron en frecuencia de eventos, fuera del límite de placas, las zonas situadas al NE de Las Tunas y en la región de Moa y su entorno.
Durante el año ocurrieron 14 sismos perceptibles en el territorio cubano, 5 relacionados a la zona de falla Oriente, 5 en otras zonas del territorio nacional y 4 cuyos epicentros estaban situadas en Haití (2), Jamaica (1) y Honduras (1). En todos estos casos la intensidad máxima sentida en Cuba fue de III en la escala EMS/98, sin que se reportaran daños materiales ni afectaciones a la salud humana o animal. Un evento de magnitud 3.9 ocurrió en la zona de Moa-Purial, donde se presentaron 1530 sismos en tres enjambres de alrededor de 500 eventos cada uno, aunque con magnitudes inferiores a 4 (Tabla 2).
Durante los dos últimos años se ha presentado una actividad sísmica inusual al norte de Las Tunas, donde se han registrado 1025 eventos de poca magnitud. Por su novedad este nodo se encuentra bajo observación y se reúnen datos para su mejor caracterización. Esta actividad sísmica pudiera estar vinculada a distintos sistemas de fallas que se encuentran al norte de Cuba y La Española, en la zona meridional de las Bahamas.
Fuente: Cenais
