Como se conoce, la victoria alcanzada por las Avispas de Santiago de Cuba en el juego final de la sub-serie que disputaron con los Cazadores de Artemisa fue confiscada a favor de este último equipo a causa de la indebida utilización del lanzador Yoendris Montero quien estaba inhabilitado para trabajar por la cantidad de lanzamientos acumulada en sus salidas previas.
Un resultado muy lamentable que interrumpe el curso de reanimación del equipo santiaguero que perdió así la que debió ser su tercera victoria consecutiva, luego sufrir una calamitosa gira que lo sepultó en el último peldaño de la tabla de posiciones.
No hay duda alguna que la responsabilidad corresponde netamente a los encargados de llevar el control del trabajo de los lanzadores, quienes están obligados a mantenerse totalmente vigilantes de las regulaciones fijadas en el reglamento de la competencia.
Precisamente por ello hemos advertido en las redes sociales comentarios de inconformidad con esta penalidad que echa por tierra el esfuerzo del colectivo en su conjunto cuando lo más justo parecería sancionar individualmente a los causantes de esta violación.
Sin embargo es claro que el propósito de esta medida es evitar que un equipo pueda favorecerse de una victoria en la que medió alguna acción ilegal aunque los jugadores en si mismos no tengan responsabilidad alguna en lo sucedido.
No parece cosa tan difícil llevar el control exacto de la cantidad de lanzamientos y en consecuencia conocer los límites a que están sujetos los serpentineros en medio del esfuerzo por alcanzar la victoria por lo que experiencias amargas como esta carecen de justiificación y son un valladar autoimpuesto que pone en entredicho al cuerpo de dirección.
Dejando atrás este lamentable suceso vale recordar que hoy darán inicio las séptimas sub-series del certamen pero solamente hay dos juegos programados, son estos el que sostendrán Matanzas y Las Tunas en el Julio Antonio Mella y el pleito animado por Gallos de Sancti Spíritus y Avispas de Santiago de Cuba en el Guillermón Moncada.
Problemas en la transportación del equipo Cazadores de Artemisa provocaron la llegada tardía del conjunto a su territorio y por lo tanto hoy no habrá juego en el 26 de Julio, por lo que el primer choque de esta subserie frente a Industriales se realizará el viernes 8 a la 1:30 pm.
El compromiso bilateral se completará el sábado 9 con doble cartelera a 7 entradas a partir de las 10:30 y finalmente el domingo 10 el juego restante a partir de la 1:30 pm.
Por último un breve repaso a los números colectivos de los oponentes que saldrán a escena en el Guillermón Moncada.
Comienzo por hacer notar el contraste en el desempeño alcanzado por Gallos y Avispas; los primeros están protagonizando una de las mejores actuaciones en la liga y tras ceder recientemente el liderazgo que llegaron a alcanzar se hallan a dos juegos de diferencia de los Cocodrilos de Matanzas que es el actual vanguardista.
Por su parte los segundos están hundidos en el sótano a siete juegos de la cima, consecuencia directa de una pesarosa gira en la que apenas ganaron dos de un total de doce juegos disputados.
En materia ofensiva los emplumados son el segundo mejor equipo con promedio colectivo de .303, solamente por detrás del otro equipo que rebasa la cota de 300, Matanzas que exhibe .325.
Santiago de Cuba por su parte es el de más pobre bateo al promediar solamente para .253.
En el orden del picheo los locales sacan una estrecha ventaja. A ambos planteles los rivales les batean para .306 pero la efectividad colectiva de los santiagueros es ligeramente mejor, 4.01 frente a 5.22.
Por último en materia defensiva los números favorecen claramente a los Gallos que ostentan el mejor resultado del campeonato al fildear para .976 frente al pésimo .944 que muestran las Avispas.
Luego no es complicado concluir que el expediente general de los emplumados les confiere el favoritismo para esta porfía de cuatro juegos a lo que habría que añadir como antecedente la barrida que propinaron a los rojinegros en el José Antonio Huelga.
