Palma Soriano, Santiago de Cuba, 23 feb.— José Martí y Fidel Castro son pilares del proceso revolucionario cubano, ellos sentaron bases sólidas para el fundamento jurídico de este pueblo.
Decir Martí y Fidel es decir continuidad. Pensamiento y acción de tiempos diferentes pero se entrelazaron por la historia. Sin dudas el legado de ambos está recogido en la nueva Constitución cubana.
Martí dio los fundamentos éticos y morales de nuestro país; Fidel con el Programa del Moncada sumó a sus principios el legado anterior llevando a la Constitución de 1976 los mejores basamentos jurídicos para nuestro pueblo.
Porque los cubanos somos martianos y fidelistas, combinación sui generis en la historia de nuestro proceso revolucionario la nueva Carta Magna, la ley de leyes que refrendaremos este 24 de febrero se basa en la unión de los principios “Con todos y para el bien de todos”, “Por los Humildes y para los humildes”.
