Santiago de Cuba, 9 junio.— Con el oído bien pegado a la tierra para revisar el impacto de la implementación de las medidas que buscan minimizar los altos índices de contagio por la Covid-19 en Santiago de Cuba, Lázaro Expósito, primer secretario del partido en la provincia, Beatriz Jhonson, gobernadora y Carilda Peña, viceministra de salud pública encabezaron una comitiva por dos de las áreas de salud más comprometidas epidemiológicamente.
En un primer momento fueron informados en el policlínico 28 de Septiembre del reparto Altamira acerca de las acciones realizadas para enfrentar el rebrote del nuevo coronavirus y se verificaron las condiciones objetivas de dos vacunatorios que radican en los consultorios 4 y 21 respectivamente, para la intervención sanitaria con el candidato vacunal Abdala, lo mismo ocurrió en el consultorio 40 del área de salud perteneciente al distrito José Martí.
En el policlínico del mismo nombre factores de la comunidad rindieron cuentas de las incidencias que mantienen a esta zona como la más compleja por la cantidad de pacientes confirmados.
Sin importar que las condiciones climáticas se deterioraran a mediados del recorrido, la manifestación de alegría y patriotismo que implica la vacunación fue el factor común en las inspecciones.
