París, 22 sep.— Miles de policías y gendarmes vigilan hoy esta capital, donde entraron en vigor medidas de seguridad como el cierre de lugares y estaciones del metro ante el anuncio de una protesta nacional de los chalecos amarillos.
Según el prefecto de la policía de París, Didier Lallement, siete mil 500 uniformados, entre ellos militares y equipos antimotines, forman parte de la movilización de las autoridades, que será similar a la activada el 1 de mayo, mientras algunos medios la comparan con la desplegada a finales del año pasado, cuando los chalecos amarillos llegaron a reunir cientos de miles de personas.
La Prefectura indicó el cierre de varias estaciones del metro y reiteró la prohibición de reunión para quienes formen parte del movimiento que prevé protestar por cuadragésimo quinto fin de semana consecutivo desde el 17 de noviembre.
Según el comunicado, los lugares a los que no tienen acceso son, entre otros, los Campos Elíseos, la Asamblea Nacional, Matignon (sede del Primer Ministro), la catedral de Notre-Dame, Trocadero y la torre Eiffel.
En las redes sociales, los chalecos amarillos convocaron a tomar París, instando a que los Campos Elíseos sean el centro de sus manifestaciones en demanda de justicia social.
El movimiento llamó a un renacer, después de semanas con escasa participación en sus actos, en comparación con los presentes a finales de 2018 y principios de esta año, cuando pusieron contra las cuerdas al gobierno y contaron con un amplio respaldo de la opinión pública, el cual ha descendido notablemente.
Las protestas tienen lugar coincidiendo con el comienzo de dos días de la edición 36 de las Jornadas Europeas de Patrimonio, durante las que se abren al público edificios estatales, incluyendo el Palacio del Elíseo, los ministerios y las cámaras del Parlamento; museos y monumentos.
Ante las manifestaciones anunciadas por los chalecos amarillos, algunos sitios no abrirán sus puertas, mientras en otros se estableció la inscripción obligatoria vía Internet para visitarlos, como el Palacio del Elíseo y la Asamblea Nacional.
Este sábado también están convocadas movilizaciones contra el cambio climático, como parte de la jornada mundial de Huelga por el Clima, y una manifestación de la Confederación General del Trabajo (CGT), una de las principales organizaciones sindicales francesas, en rechazo a la reforma al sistema de jubilación promovida por el gobierno.
Al margen de las miles de personas que se esperan en estas acciones, las autoridades no consideran que representen un peligro significativo en materia de seguridad.
Sin embargo, en el contexto de la convergencia de varias protestas, se prevé un escenario tenso en esta capital y otras ciudades del país.
