El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba por el gobierno estadounidense dificulta los servicios de acueducto y alcantarillado en el país, denunciaron los principales directivos de la Organización Superior de Dirección Empresarial (OSDE) Agua y Saneamiento, en reciente visita al territorio avileño.
Abel Elpidio Salas García, presidente de esa estructura, manifestó que la adquisición de materias primas y equipamiento se encarece ante la obligatoriedad de importar desde países distantes, debido a la negativa de naciones cercanas a comercializar con Cuba por temor a las sanciones de la administración de Estados Unidos.
Componentes eléctricos, sistemas de bombeo, materiales de tecnologías hidráulicas y otros recursos esenciales pudieran obtenerse en naciones cercanas, con buena calidad y a menor costo, pero el distanciamiento de los comerciantes de la región conlleva a realizar las compras en países lejanos, manifestó.
Explicó que el desplazamiento hacia mercados geográficamente distantes, como China y Francia, ocasiona gastos superiores por traslado y demoras en el arribo de equipos, piezas y materiales al territorio cubano, lo que limita el avance de obras que mejorarán la calidad de los servicios.
Salas García rechazó, además, las limitaciones impuestas por el cerco económico estadounidense para acceder a equipamientos que permitirán implementar procesos de modernización tecnológica.
Cosset Torres Tondike, vicepresidenta primera de la mencionada OSDE, puntualizó que en la actualidad carecen de recursos para ejecutar reparaciones planificadas, como consecuencia de las dificultades con las importaciones, a pesar de las prioridades establecidas por el país para otorgar financiamiento a este sector.
La política hostil del gobierno estadounidense obstaculiza las compras de equipos en el exterior, efectuadas a través de la empresa importadora‒exportadora Cubahidráulica, de manera que las últimas maquinarias para labores de acueducto y alcantarillado arribaron en el año 2004, por tanto, los equipos sufren sobreexplotación, argumentó.
En este complejo escenario se fortalecen los vínculos con las universidades cubanas para buscar soluciones que contribuyan a palear el déficit y sustituir recursos importados, además de asegurar la reparación y el diseño de piezas que mantienen la vitalidad de añejas máquinas y equipos de bombeo, destacó.
Los encadenamientos productivos con entidades de los sectores estatal y no estatal también favorecen el acceso a recursos destinados a la reparación de plantas potabilizadoras (material filtrante, barandas, pisos y válvulas), antes adquiridos en el mercado internacional.
La capacidad de resistencia y búsqueda de alternativas para enfrentar las limitaciones impuestas por el bloqueo, ha permitido la remodelación de las fuentes de abasto de agua en numerosas instituciones de salud de la capital del país, con la finalidad de garantizar un suministro estable, expuso.
Torres Tondike particularizó en la reparación de las redes y casetas de las estaciones de bombeo de hospitales pediátricos y la Escuela Latinoamericana de Medicina, de acuerdo con las prioridades establecidas por el Ministerio de Salud Pública.
Aunque los centros de asistencia médica constituyen una prioridad, atendiendo a las complejidades epidemiológicas, también se impulsan obras en otros sectores estratégicos como el Turismo y Educación, además de priorizarse la atención a barrios y comunidades en condiciones de vulnerabilidad, precisó.
