Santiago de Cuba, 7 junio.— Con el propósito de desarrollar una agricultura sostenible, especialistas del Centro de Información y Gestión Tecnológica (Megacen) y de medio ambiente evalúan el impacto medioambiental del cultivo de plátano en la finca La Esperanza de esta ciudad.
Claudio Javier Carracedo González, especialista de Megacen, refirió a ACN qie áreas extensas dedicadas al monocultivo de esta especie no tienen un efecto positivo para la agricultura, lo que se hace más evidente en el contexto actual.
El inadecuado manejo de las formas en que el hombre cultiva sus alimentos ha provocado degradación de los suelos, salinidad y pérdida de la biodiversidad, afirmó.
De ahí que el objetivo de esta investigación sea indagar en las afectaciones medio ambientales de los agro sistemas plataneros y tomamos como punto de partida la Finca La Esperanza, puntualizó.
Subrayó que los principales resultados hasta el momento señalan el uso indiscriminado de fertilizantes químicos y la necesidad de enriquecer el ecosistema con otras plantaciones, por lo que abogamos por el aprovechamiento del terreno para sembrar árboles frutales y medicinales, dijo.
También es recomendable la aplicación de bioestimulantes y biofertilizantes bacterianos en cultivos de interés hortícola, lo cual contribuye a la sustitución de importaciones de fertilizantes y fungicidas que aportan nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K) a cultivos de interés agro-alimentario, destacó Carracedo González.
Con la aplicación de la ciencia y técnica en el intercalamiento de cultivos se logra un uso eficiente del suelo, al mejorar su composición nutricional mediante el aporte y reciclaje de nutrientes esenciales como nitrógeno, fósforo, carbono y potasio, con poco o ningún producto de alta tecnología, afirmó.
La Finca Esperanza esta ubicada en Laguna Blanca, uno de los principales polos productivos de Santiago de Cuba. (Claudia María Delgado Torres)
