Como en aquella ocasión, el convoy motorizado arribará a La Habana tras recorrer más de mil kilómetros desde la ciudad de Santiago de Cuba (oriente), para llegar hasta el otrora campamento militar de Columbia, hoy Ciudad Escolar Libertad.
En ese sitio, el Comandante en Jefe revolucionario confirmó a Cuba y el mundo la victoria sobre la dictadura de Fulgencio Batista (1952-59), apoyada por Estados Unidos, y anunció el inicio de una nueva etapa de transformaciones en la isla.
La tiranía ha sido derrocada. La alegría es inmensa. Y sin embargo, queda mucho por hacer todavía. No nos engañamos creyendo que en lo adelante todo será fácil; quizás en lo adelante todo sea más difícil, expresó el máximo líder rebelde en ese discurso, que concluyó en la madrugada del día 9 de enero.
De acuerdo con medios locales, en cada poblado y ciudad del trayecto, los integrantes de esta reedición de la Caravana de la Libertad reafirmaron la voluntad de resistencia del pueblo cubano frente al recrudecimiento del bloqueo y las agresiones de Estados Unidos.
También expresaron el respaldo a la continuidad del proceso revolucionario iniciado en la isla hace 62 años.
Está vez cada etapa del periplo se limitó hasta la salida de las ciudades, en cumplimiento de las medidas sanitarias implementadas para combatir la pandemia de la Covid-19.
