Santiago de Cuba, 28 sep.— Los Toros de Camagüey embistieron letalmente a las Avispas de Santiago de Cuba con un abultado racimo de siete carreras en la segunda entrada y ese respaldo ofensivo le dio comodidad al zurdo abridor Dariel Góngora (3-3) quien recibió su primer castigo a la altura del cuarto episodio cuando un estacazo de Ricardo Ramos permitió a los locales descontar dos carreras y estrechar la diferencia.
El ramillete que puso tempranamente en ventaja a los visitantes fue fruto de un fuerte ataque de siete incogibles, cuatro de ellos ante el abridor Danny Betancourt (4-4), incluyendo un doblete de Loidel Chapellí que remolcó a tres corredores y decretó la expulsión de lanzador indómito.
Antes ya los camagüeyanos habían anotado otras dos ante Betancourt en esa propia entrada, la primera impulsada por Marino Luís con sencillo y la segunda por fly de sacrificio de Danny Luaces.
En total Betancourt solo aguantó una entrada y un tercio, permitió cuatro imparables y le anotaron seis limpias que llevaron su promedio de efectividad en el campeonato a 3,06 y lo hicieron descender en el listado de los primeros en este departamento.
Las dos últimas de ese productivo capitulo cuajaron por sencillos impulsores de Humberto Bravo y Leonel Segura, ambas conexiones ante el relevista Osmedi García; esa última rayita asentada en el expediente de García pues la primera fue anexada a Betancourt.
Santiago volvió a la carga en el sexto y sacó del montículo a Góngora al combinar un doblete de Rudens Sánchez y un sencillo impulsor de Marlon Serrano, este último detonante para la sustitución del abridor camagüeyano, ya con dos outs en la pizarra.
Después de una fugaz actuación de Erislery Basulto (enfrentó a un bateador y lo dominó) fue traído a la lomita Vicyohandri Odelín para cerrar el juego (la doble jornada condiciona los partidos a siete entradas) pero el experimentado serpentinero fue recibido con cañonazo de Guibert a la banda derecha y por ese mismo ángulo del terreno momentos después sacó la pelota del parque Edilse Silva y dio las dos últimas carreras a Santiago de Cuba.
Eso fue todo para Odelín, quien cedió el puesto a Carlos Alfredo Pérez que logró poner la entrada en dos outs pero las Avispas siguieron determinadas a luchar por la victoria y un sencillo de Rudens Sánchez al que siguieron par de boletos llenaron las almohadillas y pusieron en circulación empate y ventaja ganadora.
En esa situación Borroto no lo pensó dos veces y trajo del bullpen a Roger Trench, autor del ponche a Marlo Serrano que sepultó definitivamente las esperanzas santiagueras.
Las Avispas contaron con un impecable relevo largo de cuatro y dos tercios de entrada suscrito por Uber Mejías quien dejó sin jits a los rivales y les colgó cuatro argollas; sin embargo la ofensiva santiaguera no pudo remontar el abultado racimo de la segunda entrada y el juego finalizó 7 x 5 a favor de los visitantes.
Con ese triunfo a primera hora los Toros de Camagüey se afirmaron en la cima con 1,5 juegos de ventaja sobre Santiago de Cuba.
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