Beijing, 15 feb.— China y Estados Unidos siguen hoy aquí tras la búsqueda de un acuerdo que dé fin al conflicto económico-comercial, pero además satisfaga sus intereses, estrategias y negocios tanto en el plano bilateral como global.
Sus equipos desarrollan la tercera ronda de negociaciones de este año, apremiados ahora porque están cerca de que expire el 1 de marzo la tregua al diferendo que en los últimos meses hundió a ambas potencias en un cruce de incrementos tarifarios y medidas restrictivas a la actividad mercantil.
La parte china la encabeza el viceprimer ministro Liu He, mientras por la estadounidense están al frente el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y el representante adjunto de Comercio Jeffrey Gerrish.
Las conversaciones siguen a puertas cerradas, deben terminar en esta jornada y de momento no trascendió ninguna información oficial.
Pero algunos medios internacionales de prensa -citando fuentes anónimas- reportan que siguen sobre el tapete sensibles temas como la protección de los derechos de propiedad intelectual, subsidios estatales y la transferencia tecnológica.
Hace unas horas Larry Kudlow, asesor económico de la Casa Blanca, comentó sobre la ‘buena vibra’ del encuentro e incluso informó de una reunión este viernes en Beijing de Mnuchin y Gerrish con el presidente Xi Jinping, algo que China no confirmó aún.
La comunidad internacional sigue con mayor atención las conversaciones actuales porque cada vez queda menos tiempo para que dure la difícil tregua de tres meses consensuada por Xi y el mandatario estadounidense, Donald Trump, el pasado 1 de diciembre.
El gobernante norteamericano especuló a principios de semana sobre una posible prórroga de 60 días a la pausa si los negociadores logran acercarse a un ‘pacto real’, para así darles más tiempo a finiquitarlo.
Tal convenio debe sustentarse en el respeto, equidad y beneficio compartido, aparte de conllevar a levantar los gravámenes aplicados desde julio pasado y normalizar las relaciones de negocios.
