La Habana, 17 dic.— Un millón 700 mil jubilados de Cuba comienzan a recibir desde hoy un adelanto de sus pensiones, las cuales serán incrementadas como parte del ordenamiento monetario que entrará en vigor el próximo 1 de enero.
Con la eliminación de la dualidad monetaria y cambiaria habrá una devaluación del peso cubano (CUP) para el sector empresarial que repercutirá en el alza de los precios de bienes y servicios, algo que estará respaldado con el aumento de los ingresos de la población.
Para llegar a enero con fondos suficientes para asumir los nuevos costos, el gobierno cubano decidió anticipar mil pesos del total de las pensiones y posteriormente este mismo mes recibirán igual tratamiento los trabajadores de todos los sectores y quienes reciben asistencia de la seguridad social.
Con la llegada del nuevo año el sueldo mínimo pasará a ser dos mil 100 pesos y los ingresos de quienes ya trabajaron a lo largo de su vida subirán en correspondencia con una escala, que va de mil 528 pesos hasta mil 733 o más en dependencia de sus ingresos actuales.
Igualmente, los 119 mil hogares con apoyo financiero de la seguridad social tendrán un reajuste en sintonía con los nuevos precios a partir del 2021, cuando desaparecerán parte de los subsidios y gratuidades indebidas.
Marino Murillo, jefe de la Comisión de Implementación de los Lineamientos del Partido Comunista de Cuba, afirmó la víspera ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento) que por la unificación monetaria el peso se devaluará en casi dos mil 300 por ciento para el sector empresarial y presupuestado estatal.
Ese elemento forma parte de la reforma integral que pretende eliminar distorsiones de la economía nacional, entre ellas la ineficiencia de algunas entidades.
Desde el 1 de enero dejará de circular en la isla el peso cubano convertible (CUC) y quedará el peso cubano (CUP) como moneda oficial para realizar todas las operaciones en el país con una tasa de cambio respecto al dólar de 24 por uno.
