Por José Luis López Sado
Matanzas.— Oficialmente ganó La Habana 6×0 a Matanzas. Pero entre vencedor y vencido, se cumplió el objetivo de rememorar el 150 aniversario del primer juego de béisbol en Cuba con información estadística, disputado el 27 de diciembre de 1874 en el Estadio Palmar de Junco, de esta ciudad.
En aquel partido el equipo Habana Baseball Club venció al anfitrión Matanzas por 51 “corridas” a nueve. Y ahora, aunque no hubo revancha yumurina, sí quedó sabor a recuerdo, remembranza e historia.
Intrépidos y decididos a intentar mostrar las habilidades de otrora, salieron a la grama longevas figuras del pasatiempo nacional. Y se apreció lo esperado: entrega, tesón y ese respeto que en cada partido sintieron por el público en el graderío.
El dios Cronos, que siempre pasa factura, cobró la caída de las hojas del almanaque de los experimentados jugadores, que tantas alegrías tributaron en sus años mozos a los parciales de sus respectivas provincias.
Y sin quererlo ellos, claro está, hubo jugadas fallidas, que antes constituían outs al seguro en cualquier base.
Las palmas para los movimientos del zurdo pinero Wilber Pérez sobre la lomita, la espectacular pose del legendario primer bate Wilfredo Sánchez, o el doblete del ex lanzador Lázaro de la Torre con bases llenas.
«Excelente día que reunió a muchos peloteros que no nos veíamos desde hace muchos años. Creo que complacimos al público presente. Esta iniciativa debe llevarse a cabo con más frecuencia», expresó el derecho capitalino Lázaro de la Torre.
Mientras, el ex slugger matancero Lázaro Junco, comentó la importancia de rememorar en casa ese partido de hace 150 años. Y reconoció el esfuerzo de todos por hacerlo lo mejor posible a pesar de los años de edad.
Este duelo puso fin a un grupo de actividades organizadas por la Federación Cubana de Béisbol-Softbol, por los 160 años del béisbol en la Isla y por apenas tres de declararlo Patrimonio Cultural de la Nación.
