Juventud, sí o sí

Granma
Granma
Órgano Oficial del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
Estas líneas son el abrazo escrito para quienes han envejecido a lo largo de seis décadas y no dejarán envejecer a ese Partido que necesita ser eternamente joven

Autor: Pastor Batista Valdés

Parque Serafín Sánchez, de Sancti Spíritus. Enero de victorias. Miles de personas han vuelto a converger en alegre concentración. Entre los nombres que va dejando escuchar el audio está el de Geisska Águila González, una mujer joven, administradora de farmacia. Aunque fuerte, decidida en todo, siente que algo le salta dentro del pecho. Avanza. Sobre ella, todas las miradas. A sus ojos, el carné rojo que la registra como militante del Partido Comunista de Cuba. No faltarán, de inmediato, las felicitaciones de colegas, amigos; ni el abrazo doblemente cariñoso de Surelis, con quien comparte oficio, tiempo, vida.

¿Será distinto el sano orgullo, el latido fuerte, la satisfacción en quienes este 16 de abril –como cada año– reciben la «constancia de su constancia», por acumular, de cinco en cinco, hasta 55 calendarios dirigiendo o laborando dentro del Partido, a todos los niveles?

No lo creo. Como mismo vi, en los años 90, «irse de revoluciones por minuto, de tanta emoción», a Jorge Pérez, humildísimo obrero que dedicó toda su vida a labores de mantenimiento en el Comité Provincial del Partido en Las Tunas, he visto sonreír también –y no por formalidad– a muchísimos jóvenes que sacrifican el añorado ejercicio de la profesión que estudiaron para asumir funciones de dirección partidista.

De ello se escribe poco, aun cuando habría tanto por decir… De manera que nada justifica el silencio, aunque en silencio, sin ruidos ni pretensiones de llamar la atención, le entreguen tiempo, capacidad, inteligencia y hasta salud a la organización que sigue teniendo el insustituible –y nadie piense que fácil– reto de dirigir a la sociedad cubana contra los embates de vientos y de mareas.

Hace un momento me preguntaba si la palabra (concepto, convicción) continuidad tendría sentido real, concreción, sin la presencia protagónica de los jóvenes. Sin ellos, honestamente, me parece más una formulación teórica, abstracta, apenas una aspiración.

A menudo hay quienes hacen referencia –tal vez no con segundas u oscuras intenciones– a la cantidad de jóvenes que en la coyuntura actual emigran en busca de otras oportunidades. Negar esa realidad sería tan absurdo como subestimar o no tener en cuenta a quienes, pudiendo hacerlo, no lo hacen; como también merecen reverencia quienes vencen su paso etario por la Unión de Jóvenes Comunistas y pasan al Partido, o incluso ingresan a este sin haber militado antes en la organización juvenil.

Digo más: disgusto o insatisfacción que podamos tener en ese terreno, no culpemos a muchachos y muchachas que, cuando llamamos, acuden; carguemos nosotros, los de más edad y experiencia, con la responsabilidad.

Estas líneas son, por tanto, el abrazo escrito a yema de muchos dedos y de manos de toda Cuba, para quienes han envejecido a lo largo de seis décadas y no dejarán envejecer, llenando de juventud y de alegría, a ese Partido que necesita ser eternamente joven… de los jóvenes, como lo concibió aquel muchachón llamado Julio Antonio Mella, quien fundó un Partido Comunista, junto al veterano Carlos Baliño.

Si así no fuera, entonces, por ejemplo, Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René no habrían llevado consigo en pecho, cerebro y sangre, durante el brutal encierro en cárceles estadounidenses, el carné que recibirían otra vez en 2017, tras regresar a Cuba, haciendo realidad quizá la afirmación más audaz, pero también más convencida que haya hecho nuestro Comandante en Jefe a lo largo de su vida: ¡Volverán!

Autor

Destacadas
Comentarios
Jornadas de trabajo intenso; en esta cobertura tuve la oportunidad de acercarme a personas revolucionarias y aman y honran la…
blank
Joel @ No todo está perdido
abril 11, 2024 at 1:44 am
Son los jóvenes quienes, en mayoría, llevan el mayor peso del quehacer cotidiano del país. Así ha sido siempre. No…
El secretismo no es política de estado, sin embargo, hay directivos en entidades que lo practican...
Hay que adelantarse a los acontecimientos. La ingenuidad en la comunicación, cuesta.
0 0 votes
Article Rating
Subscribe
Notify of

0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments
0
Would love your thoughts, please comment.x
()
x