Autor: Orfilio Peláez
Bajo la conducción del Centro de Contaminación y Química de la Atmósfera (Cecont), del Instituto de Meteorología, Cuba trabaja en el fortalecimiento metodológico del Sistema de Vigilancia y Alerta Temprana del ozono troposférico (O3), compuesto contaminante que, cuando rebasa los valores permisibles en esa capa inferior de la atmósfera, muy próximo a la superficie terrestre, resulta dañino para diferentes cultivos agrícolas, como el tabaco, la papa, el tomate y el ajo.
Así trascendió durante la vi Reunión Nacional de Contaminación Atmosférica, que reunió a expertos de todo el país, vinculados a la temática.
De acuerdo con el máster en Ciencias Arnaldo Collazo Aranda, investigador del Cecont, dentro de los impactos desfavorables provocados por el O3 en la agricultura, resaltan la disminución del rendimiento y la calidad de las cosechas, al afectar el follaje de las plantas y favorecer la aparición de plagas y enfermedades.
Este servicio científico–técnico especializado, recalcó, tiene el propósito de advertir a los productores agrícolas del sector estatal y privado, con cinco días de antelación, cuándo deben esperar incrementos en las concentraciones de ozono superficial, para que adopten las acciones pertinentes destinadas a proteger las plantaciones y disminuir las pérdidas, como son, por ejemplo, la activación de los sistemas de riego y la aplicación de sustancias fungicidas.
A partir de los resultados de las investigaciones realizadas por el Cecont, en la actualidad se ha logrado determinar qué tipo de impactos ocasionaría el incremento del ozono troposférico para cada cultivo, y los niveles de afectación expresados en porcentaje, a nivel de provincias y regiones del territorio nacional.
