La Habana, 23 sep.— Carlos Fernádez De Cossio, director general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, condenó hoy en Twitter las nuevas medidas adoptadas por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, con la que se restringe aún más los derechos de los estadounidenses.
Algunos detalles de estas directivas, que se harán efectivas a partir de este jueves, se conocieron hoy, y entre ellas se menciona la creación de una nueva lista de Alojamientos Prohibidos en Cuba, en las que se incorporarán entidades bajo la propiedad o el control del Gobierno cubano, de un funcionario de este, de un miembro del Partido Comunista de Cuba, o de los familiares cercanos de estos.
También se ha anunciado que se restringirá la importación hacia EE.UU. de productos de alcohol y tabaco de origen cubano, y se les quitará la autorización a personas sujetas a la jurisdicción estadounidense de asistir u organizar reuniones o conferencias profesionales en Cuba.
Además, se elimina la autorización mediante licencia general para las transacciones relacionadas con actuaciones públicas, clínicas, talleres, competiciones deportivas y de otro tipo y exposiciones, lo que, según Fernández De Cossio, demuestra el asombro y la decepción del gobierno norteamericano ante la fortaleza de la Revolución cubana.
Para justificar las medidas el secretario de Estado, Mike Pompeo, volvió a usar como argumento supuestas violaciones de derechos humanos en la mayor de las Antillas, y la solidaridad de Cuba con el gobierno constitucional de Nicolás Maduro en Venezuela.
Restringir los viajes de norteamericanos a la nación caribeña ha sido una medida que se ha agudizado durante el mandato de Donald Trump; el 5 de junio de 2019 se vetaron los viajes educativos pueblo a pueblo de carácter grupal.
Además, a ello se unió la prohibición de que salieran hacia el archipiélago cubano embarcaciones recreativas y de pasajeros, incluyendo cruceros y yates, y aeronaves privadas y corporativas.
En diciembre de 2019 se puso en práctica que las aerolíneas de ese país solo podrán realizar rutas a La Habana, y se suspendieron los vuelos a destinos fuera de esa capital, entre ellos Villa Clara, Camagüey y Holguín.
La estrategia de los Estados Unidos se centra en desacreditar la labor de Cuba, cuando por ejemplo los ataques de políticos anticubanos contra la cooperación médica internacional se vuelcan al Congreso, con las prácticas típicas del gansterismo: la mentira, la extorsión, el chantaje y la total falta de escrúpulos, según denunció Fernández De Cossio hace unos días en Twitter.
