Bayamo, 27 feb.— Tras una manifestación popular de admiración y dolor, fue sepultado este martes en el cementerio de esta ciudad Luis Manuel Ramírez Villasana, Héroe del Trabajo de la República de Cuba y exponente de los hombres que desarrollaron la obra educacional de la revolución socialista en el país.
Nacido aquí en 1939, el ejemplar maestro falleció este lunes, debido a una bronconeumonía, y miles de personas, la mayoría docentes y estudiantes, acudieron a su hogar y a la necrópolis local, para darle el último adiós.
Al despedir el duelo, Dalgis Rodríguez Gala, secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte en la provincia de Granma, recordó que Villasana educó, sobre todo, con el ejemplo, la modestia, el entusiasmo, la creatividad y la afabilidad.
Hijo de herrero y ama de casa -dijo- se hizo educador con enormes sacrificios personales y de la mamá, y sobresalió como maestro voluntario, alfabetizador, dirigente juvenil, cuadro sindical, militante del Partido Comunista de Cuba (PCC), delegado de circunscripción y diputado en tres mandatos del Parlamento.
Agregó que en la República Popular de Angola fue combatiente internacionalista y asesor de la campaña de alfabetización, y en Granma resultó el primer presidente de la Asociación de Pedagogos de Cuba, además de realizar una admirable labor en la Asociación de Innovadores y Racionalizadores.
Vladimir Rodríguez, funcionario del Comité Provincial del PCC, afirmó que la obra de Villasana trascendió los ámbitos de la educación y de la provincia de Granma, para convertirlo en ejemplo de revolucionario cubano, forjado al calor de los principios y la entrega sin límites.
Entre las personalidades que rindieron tributo al brillante educador, estuvieron Teobaldo de la Paz Vanegas y Juan Ricardo Verdecia Santiesteban, Héroes del Trabajo de la República de Cuba. (Martín Corona Jerez)