Ciudad del Vaticano,6 ene.— El papa Francisco apeló hoy a los mandatarios europeos a demostrar su solidaridad con los 49 migrantes a bordo de dos naves en el mar Mediterráneo a la espera de un puerto seguro donde desembarcar.
El sumo pontífice hizo ese llamado al concluir el tradicional rezo dominical del Ángelus en la Plaza de San Pedro, mientras los barcos pertenecientes a las organizaciones no gubernamentales Sea Watch y Sea Eye aguardan una decisión en aguas territoriales de Malta.
La odisea comenzó el 22 de diciembre último cuando la ‘Sea Watch 3’ auxilió a 32 migrantes procedentes de Libia, en tanto la ‘Professor Albrecht Penck’, de Sea Eye, hizo lo mismo una semana después al socorrer a otros 17.
Ante el deterioro de las condiciones meteorológicas y el peligro para la navegación, las autoridades maltesas autorizaron el ingreso de las naves en sus aguas sólo para guarecerse del mal tiempo y recibir apoyo logístico.
La vocera de la Comisión Europea, Mina Andreeva, señaló hace dos días en Bruselas que ese órgano realiza gestiones con algunos países miembros ‘dispuestos a encontrar una solución’ y precisó que no habrá comentarios hasta que los hagan los países involucrados.
Por su parte, el viceprimer ministro italiano Luigi Di Maio, se pronunció a favor de recibir en este país a las mujeres y niños, con el argumento de que no deben continuar en el mar como rehenes ‘del egoísmo de los Estados europeos’ y pidió que Malta les permita desembarcar y los envíe a Italia.
Sin embargo, el otro viceprimer ministro, Matteo Salvini, rehusó recibir a los migrantes y limitó la eventual ayuda a medicinas, alimentos y ropa, al tiempo que reiteró la necesidad de enfrentar el tráfico de personas y aseveró que con menos salidas desde los puntos de embarque habrá menos muertos en la travesía.
Por su parte, la portavoz de Sea Watch en Italia, Giorgia Linardi, dijo a una radio local que esa organización no gubernamental se opone a separar a las personas a bordo, por lo que las mujeres y los niños no desembarcarán sin sus familiares.
