Como parte de un recorrido por varias provincias del país, la vice primera ministra Inés María Chapman evaluó en Santiago de Cuba la situación del abasto y los ciclos de distribución del agua.
Con el objetivo de establecer una conexión más efectiva con el contexto electroenergético del archipiélago, Chapman se reunió en la sede del Gobierno con directivos de Geysel, la Unión Eléctrica (UNE), el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, las Empresas de Agua y Saneamiento, Aguas Santiago y Aguas Turquino, en busca de soluciones para compatibilizar esos sistemas.
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Además de los problemas con la energía, durante el encuentro se conocieron las dificultades por el déficit de recursos financieros y materiales, cuya causa principal es el bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba, que impide llegar a todos los lugares con el imprescindible líquido.
Chapman indicó que las soluciones implican el mantenimiento de las centrales termoeléctricas, una operación diferente del sistema de abasto de agua y la necesidad de mover grupos electrógenos para sitios priorizados.
Destacó la importancia de la comunicación en todo este proceso, no solo la de los medios hacia la población, sino también entre las entidades involucradas.
En la ciudad de Santiago de Cuba se rehabilitó el acueducto en el año 2010 con ciclos muy estables, ahora el tiempo pasó y la operación del sistema cambió, por lo que resulta urgente trabajar en el mantenimiento de válvulas reguladores de presión y de ventosas, rememoró.
La vice primera ministra recalcó que en los últimos años aumentó la demanda de agua en la ciudad cabecera por las nuevas viviendas y construcciones, las industrias incorporadas, por tanto la operación se transforma y el mantenimiento tiene que ser sistemático.
Con el panorama energético actual se alargan los ciclos de distribución, porque las afectaciones eléctricas dificultan el bombeo en algunas zonas del municipio, en la periferia y las zonas rurales, precisó.
A esto se suma, acotó, la ausencia de neumáticos y baterías para los carros cisterna (pipas), por no encontrarse oportunamente en el territorio, entonces lo que antes se suplía por esta vía ahora se complejiza en demasía.
Chapman insistió en la existencia de cuestiones con soluciones locales como el movimiento de grupos electrógenos o de equipos de bombeo, y otras cosas que requieren de un análisis con el grupo de trabajo provincial para decidir cuáles mover desde la economía.
Indicó trabajar con celeridad en el mantenimiento, en las inversiones y en la instalación o trasladados de los grupos electrógenos y sus conexiones para poder operar sin perder tiempo.
Velar por la distribución del combustible que arribe a la provincia, vigilar y proteger los sistemas montados y los nuevos para que el agua llegue a la población fueron otras de las precisiones de vice primera ministra.
Chapman instó a laborar con mucho ingenio, resistencia creativa e innovación para lograr que la labor de operación de los sistemas, adaptado a la realidad actual del país, se realice lo más rápidamente posible.
Hay luces dentro de problemas y eso es importante que la población lo sepa, enfatizó, soluciones de puntos de fácil acceso, de bombas de mano ya instaladas, la reunión con los valvuleros para exigirles el control adecuado y para proteger las conductoras en aras de evitar los golpes de ariete en todo ese cambio de operación.
En la reunión se definieron responsables, fechas de cumplimiento para cada uno de los temas abordados y se acordó darles seguimiento por sistema de trabajo, a través de un chequeo nacional que se extiende por videoconferencias a todas las provincias del país.
Luego del encuentro la vice primera ministra recorrió la planta potabilizadora de Quintero, de gran importancia para el territorio santiaguero porque abastece a la Ciudad Héroe, la más poblada del territorio indómito.