París, 11 jul.— En medio de crecientes preocupaciones por un rebrote de la Covid-19, Francia entró hoy en una nueva fase del desconfinamiento, al terminar la urgencia sanitaria vigente por 16 semanas para frenar la propagación de la pandemia.
Las alertas de autoridades y expertos siguen sobre la necesidad de respetar las medidas de protección, a partir del incremento de la circulación del coronavirus SARS-CoV-2, por lo que el fin de la emergencia no cierra la puerta para que el gobierno aplique restricciones si la situación epidemiológica lo exige, aunque sin retornar a la cuarentena total.
A principios de mes, la Asamblea Nacional adoptó la salida de la urgencia a partir de este sábado, cuando vuelven a estar autorizados los espectáculos y las competencias deportivas en estadios, aunque con un límite de hasta cinco mil personas en el público.
También reabren los hipódromos y se reanudan los cruceros fluviales, pero las discotecas continúan cerradas.
El país superó ayer las 30 mil muertes por la Covid-19 y Santé Publique France llamó a la vigilancia, con más de 100 clústeres (grupos de casos) activos y el aumento de indicadores importantes, entre ellos la tasa de reproducción del virus por encima de uno, lo que se traduce en la posibilidad de que un contagiado contamine a más de una persona.
Si bien el escenario es desafiante y el entorno complejo, vecinos como Alemania y España han reconfinado a cientos de miles de personas ante rebrotes, el gobierno francés insiste en que la situación sigue bajo control.
Las buenas noticias vienen sobre todo de los hospitales, donde disminuyen a diario los ingresados, que bajaron de siete mil 177 a siete mil 62, y los pacientes en cuidados intensivos, de 512 a 496, según el reporte de anoche de la Dirección General de Salud. (Ileana Piñeiro)