Este 13 de agosto fue una gran jornada para Cuba en los II Juegos Panamericanos Júnior con una exhibición de coraje y entrega, coronada por un oro espectacular en remo y una plata en judo por equipos.
El cuarteto cubano de cuatro pares de remos cortos (Leduar Suárez, Roberto Carlos Paz, Henry Heredia y Adel Gutiérrez) escribió una página de leyenda. Tras recorrer los primeros mil metros en tercera posición, los remeros antillanos desataron un remontada final que los llevó a cruzar la meta en 6:01.64 minutos, superando por apenas 11 centésimas al bote brasileño (6:01.75). Chile completó el podio (6:02.93).
Roberto Carlos Paz, abanderado cubano en la inauguración, dedicó la victoria a un símbolo patrio: «Es un orgullo cerrar con este oro y más un día como hoy, en el que celebramos el aniversario del nacimiento de nuestro Comandante Fidel. Me sentía en deuda con el equipo y con el país, con el entrenador y con todos».
Leduar Suárez resumió la mentalidad del equipo: «No pensamos en nada, solo en remar más fuerte y que saliera el resultado». Ángel Luis García, presidente de la federación cubana de remo, catalogó de extraordinario el esfuerzo de nuestros remistas.
Por su parte, el equipo mixto de judo cumplió con los pronósticos al alcanzar la final, aunque cayó ante el poderoso Brasil (0-4). Yaniet Coronado (48 kg) y Wendy Martínez (63 kg) cedieron por ippon, mientras Cristhian Cordero (73 kg) y Adel Fresneda (66 kg) fueron descalificados.
Pese a la derrota, el comisionado nacional Andrés Taño González valoró el resultado: «Creo que a pesar de los contratiempos (…) el equipo cumplió con los pronósticos y nos satisface el lugar ocupado». La artemiseña Dayanara Curbelo (+78 kg) brilló como la figura cubana del torneo, aportando la única medalla de oro individual con sus demoledoras técnicas de pierna.
Con estos resultados, los jóvenes atletas antillanos demuestran que la garra y la entrega siguen siendo el sello del deporte cubano.