Hoy se cumplen 67 años de la caída en combate el 26 de junio de 1958 del joven combatiente revolucionario Pedro Soto Alba, quien perdió a vida durante el asalto del cuartel de la tiranía del poblado minero de Moa, ubicado en el norte de a entonces provincia de Oriente.
Al momento de caer Soto Alba había acumulado ya una valiosa trayectoria al servicio de la Revolución cubana, pues fue uno de los jóvenes que por indicaciones de Frank País García viajó a Méjico para incorporarse a la expedición del yate Granma, regresando a Cuba el 2 de diciembre de 1956.
Sobreviviente de la sorpresa de Alegría de Pío, Pedrín, como era llamado, pudo ocultarse hasta que fue incorporado nuevamente a la lucha formando parte del primer refuerzo enviado por Frank País a la Sierra Maestra en apoyo al naciente Ejército Rebelde.
Teniendo la experiencia del entrenamiento como expedicionario del Granma, Soto Alba se convirtió pronto en un destacado combatiente guerrillero participando en los combates de Uvero, Pino del Agua, Estrada Palma y Pilón, dirigidos personalmente por el Comandante en Jefe Fidel Castro.
Por su valentía y su actitud combativa Pedrín fue escogido para integrar la Columna Seis Frank País, que el 11 de marzo de 1958 fundó el Segundo Frente Oriental bajo las órdenes del Comandante Raúl Castro. En este nuevo escenario Soto Alba participó en numerosos combates dirigiendo alguno de ellos, por lo que fue ascendido al grado de Capitán del Ejército Rebelde.
El 26 de junio de 1958 como parte de la Operación Antiaérea que se desarrolló en el Segundo Frente contra intereses norteamericanos, el Capitán Pedro Soto Alba tomó parte en el ataque al cuartel de la tiranía en el poblado de Moa donde una granada lanzada por el enemigo le arrancó la vida.
En la propia localidad de Moa se celebraron las honras fúnebres de este Capitán con la presencia del Comandante Raúl Castro Ruz, Jefe del Segundo Frente Oriental Frank País García. La población del lugar le rindió también honores al joven revolucionario.
Por sus méritos y servicios prestado a la patria a Pedro Soto Alba se le condecoró con la Legión de Honor Frank País conferida por la jefatura del Segundo Frente, siendo ascendido póstumamente al grado de Comandante.