Incrementar la producción de leche es la única respuesta viable a la demanda de este producto, cuya inestabilidad en el suministro de la canasta familiar normada afecta la alimentación de niños, embarazadas y enfermos crónicos en Santiago de Cuba.
Por eso la máxima dirección del Partido y el Gobierno en la provincia, evaluó los trabajos de rehabilitación en vaquerías típicas de Segundo Frente, como parte del seguimiento al programa para la recuperación de la ganadería en el territorio.

En las instalaciones 1 y 7 de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) El Valle, Beatriz Johnson Urrutia, primera secretaria del Partido en Santiago de Cuba, y el gobernador Manuel Falcón Hernández, indicaron avanzar en el mantenimiento de la infraestructura, mediante la reparación de cubiertas, el cambio de luminarias, el cercado de las áreas y la puesta en funcionamiento de los equipos de ordeño.
Además, insistieron en la necesidad de asegurar la preparación de la tierra para el cultivo de pastos y forrajes; en tanto la alimentación es un componente esencial para el desarrollo óptimo de la masa ganadera.
Dean Alfredo Fernández Silva, administrador en funciones informó que además de la roturación de los terrenos, se trabaja en la limpieza de áreas infestadas de malezas, en la limpieza de la cortina de un embalse que asegurará el riego, y el acuartonamiento para una rotación eficiente de los animales.
En el análisis de lo que resta por hacer, quedó claro que deben recuperarse las tierras que inicialmente poseían las unidades pecuarias, pues la nutrición depende de un correcto balance entre las hectáreas dedicadas al pastoreo y la cantidad de animales.

Actualmente, estas vaquerías totalizan 114 animales, pero deben prepararse para asumir el manejo de 120 cabezas cada una. De ahí la importancia de lograr cultivar un cordel de caña por cada unidad de ganado mayor (res de 500 Kg), cubrir con king grass el 30% de las áreas, y sembrar otras plantas proteicas.
Dotar a las vaquerías típicas de las condiciones para impulsar la producción de leche, implica rehabilitar las 17 instalaciones previstas en la provincia. Además, resultará vital mejorar el manejo del rebaño y especialmente de las hembras para elevar la natalidad.
Según Fernández Silva, en Segundo Frente se espera recibir animales de la raza siboney cubano, resultado del cruce de las variedades cebú y holstein, cuyos especímenes se caracterizan por su resistencia y adaptabilidad a las condiciones climáticas de esta zona, y con buenos niveles de producción de leche.

«Seguiremos potenciando el mejoramiento genético mediante la inseminación artificial, y trabajando en el cuidado de las hembras gestantes para garantizar el parto en buenas condiciones y la salud de los terneros», apuntó el ganadero.
El proceso de recuperación transita, también, por una mejor organización de las labores y por elevar la protección del rebaño frente a la depredación que impone el delito.
Estas vaquerías típicas retomarán los principios definidos por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien promovió su creación en los años 70 del siglo pasado.
La estructura de las instalaciones incluye naves de concreto, tanques elevados y áreas de pastoreo cercadas.
Actualmente, la UBPC El Valle, con sus seis vaquerías entrega 400 litros de leche diariamente para niños del municipio.