Cada madrugada de lunes a domingo la alarma suena a la misma hora. Desde las cuatro en punto comienza la vida de la mujer ganadera más destacada del municipio Songo-La Maya.
Su rutina inicia con el cubo en la mano para ordeñar las vacas en la corraleta, luego traslada la leche ella misma en su carretilla hasta la bodega y el punto donde se recoge para enviar a la industria. Hoy tiene cinco vacas en ordeño con las que cumple su plan de entrega de leche diaria y 35 cabezas de ganado total.

Su nombre es Yuraida Góngora González y se dedica a la ganadería y la siembra de cultivos varios es una finca de más de 13 hectáreas de tierra. Es usufructuaria junto a su esposo y no concibe la vida de otra manera que no sea entre sus animales y cultivando la tierra.
Le gusta que sus cultivos sean variados y sembró yuca, maíz, boniato, calabaza, frutas, plátano burro, caña para alimento animal y está incursionando en el arroz en la modalidad secano. Ella defiende como ley de vida que donde hay mujer no hay fantasma, por eso ordeña, rotura la tierra, siembra, deshoja las matas de plátano y recoge cultivos cuando están listos para cosechar.

Por sus resultados ha sido reconocida en varias ocasiones por la Federación de Mujeres Cubanas y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños. Fue una de las representantes de Santiago de Cuba al evento regional de mujeres productoras, vanguardia a nivel municipal, provincial y nacional, mejor ganadera de Songo-La Maya al cierre del año 2023 y merecedora de la Distinción 23 de agosto.
A las nuevas ganaderas y campesinas recomienda esforzarse en el trabajo agrícola a diario, ponerle interés, amor y empeño, tener sentido de pertenencia, pensar siempre en el pueblo y sacarle el máximo a la tierra para alcanzar la verdadera soberanía alimentaria.