La Habana.— Con el surgimiento hace 50 años de la Estación Terrena Caribe, ubicada en las inmediaciones del Parque Escaleras de Jaruco, actual provincia de Mayabeque, la televisión satelital en Cuba dió sus primeros pasos, incluso en medio de la celebración entonces de un significativo acontecimiento.
Tal cual recuerdan los ingenieros Aroldo Ofarril Noda, jefe de esa instalación pionera e insignia de los servicios de telecomunicaciones, y Pablo Echenique Veliz, al frente allí de uno de los grupos de trabajo, su primer servicio fue en ocasión del acto conmemorativo de la Revolución de Octubre, el 7 de noviembre de 1973, en la Plaza Roja de Moscú, al permitir fuera visto casi en directo en el país.
El ahora Centro de Telecomunicaciones Internacionales sigue siendo la única estación satelital de su tipo en Cuba, compuesta de costosos e importantes equipos, entre ellos, grandes parábolas que intervienen en las operaciones de transmisión y recepción de señales telefónicas y de televisión.
Su creación fue resultado del intercambio con la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y devino un desafío tecnológico como se demostraría en el transcurso de estas cinco décadas, en que sus técnicos,
especialistas y demás trabajadores han tenido que crecerse ante limitaciones y obstáculos diversos.
El principal de éstos ha sido el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba por el gobierno de los Estados Unidos, que impide la adquisición en USA y en otros países de las piezas y equipos vitales en el trasiego satelital.
Echenique y varios especialistas han desarrollado allí un fuerte movimiento de innovadores y racionalizadores, sin dejar de reconocer la dedicación, entrega y sentido de pertenencia de sus trabajadores, algunos con más de 40 años de labor.
Ofarril y Brian Jofre de Villegas director de Aseguramiento de la Vicepresidencia de Operaciones de Redes de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), coinciden en afirmar que la estación ha permitido mostrar la realidad de Cuba al mundo.
Por si fuera poco gracias a este centro ubicado a 35 kilómetros de la capital las imágenes satelitales continúan irrumpiendo en los hogares de millones de cubanos, y por ejemplo las ediciones de los Juegos Olímpicos y el acontecer noticioso de televisoras como Telesur y Russia Today pueden ser vistos hoy gracias a la televisión satelital.
Los directivos explican que Terrena Caribe ha estado vinculada a acontecimientos importantes del país, y en ese sitio de los impresionantes parajes de Jaruco se inició la transmisión del DTH, servicio concebido por el Comandante en jefe Fidel Castro para que la señal de la televisión cubana llegara a los colaboradores médicos en la región de Latinoamérica, a partir del 2005.
Otros momentos significativos en su historia ocurrieron en 1975, cuando se introdujeron nuevos equipos para ampliar el servicio por el Sistema Intersputnik, y en 1979 al empezar el uso de los satélites estacionarios, así como el montaje de una estación Standard B del Sistema Intersalt, que facilitó la transmisión de la VI Cumbre de Países No Alineados, celebrada en La Habana del 3 al 9 de septiembre de 1979.
