«Necesitamos pensar en perpetuar la memoria de aquellos de nuestros camaradas que realmente mostraron heroísmo y sacrificaron sus vidas por la vida pacífica de nuestra gente en el Donbass y para garantizar la vida y la existencia pacíficas de Rusia misma», manifestó el mandatario.
«Estas personas se lo merecen con sus acciones y su actitud hacia el juramento”, agregó.
Durante una reunión con el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, donde a Putin le informaron la liberación de la ciudad de Mariúpol, el jefe de Estado ordenó diseñar medidas de apoyo adicionales para quienes arriesgan su integridad física en el cumplimiento de la operación militar especial en Ucrania desde el 24 de febrero.
“Además del cumplimiento de todas las obligaciones sociales con nuestros militares, especialmente con los heridos, con las familias de nuestros compañeros muertos, es necesario asegurar el cumplimiento incondicional de todas las garantías sociales, pero esto no es suficiente», añadió.
El dignatario calificó de héroes a todos los militares rusos que se distinguieron durante la liberación de Mariúpol, acción emprendida el 11 de marzo, y propuso para ellos premios especiales.
Putin volvió a subrayar que “el control de una localidad tan importante en el sur de Ucrania como lo es Mariúpol es un éxito”, al tiempo que felicitó al titular del Ministerio de Defensa por este logro.
En el encuentro realizado este jueves el titular de la cartera castrense notificó al presidente que el Ejército ruso tiene el control total de la ciudad del vecino país, y que los restos de la formación de nacionalistas presentes en la zona se refugiaron en el área industrial de la planta de Azovstal.
Al respecto, Putin ordenó cancelar el asalto a las ruinas de la industria metalúrgica, al calificarlo de poco práctico, e instó a negociar la deposición de las armas para una retirada pacífica de los atrincherados en aras de preservar la vida y la integridad de los soldados y oficiales rusos.
