La Habana, 21 ene.— A partir de la compleja situación epidemiológica que exhibe la capital, con el mayor número de casos positivos en las últimas jornadas, desde el lunes comenzó a aplicarse en policlínicos y hospitales habaneros un test de antígeno a pacientes con síntomas sugestivos de la COVID-19.
Según información ofrecida en reunión del Consejo de Defensa Provincial (CDP), cada centro de este tipo cuenta con los recursos para aplicar la prueba y, en correspondencia con el resultado, se podrá descartar la presencia del virus SARS-COV-2 en los organismos de los sospechosos.
Tatiana Viera Hernández, coordinadora de programas del Gobierno capitalino, dijo que ya se encuentran listos nueve instalaciones, con un total de 2 036 capacidades; de ellas, 566 ocupadas.
De acuerdo con los protocolos, los casos en los cuales el test sea negativo serán remitidos a hospitales dedicados a la atención de enfermedades respiratorias distintas a la COVID-19; en tanto los positivos se trasladarán hacia centros de aislamiento para sospechosos, y allí se les realizará el PCR, como examen definitorio.
Según el reporte de la ACN, las autoridades del CDP también insistieron en la necesidad de habilitar capacidades suficientes en las instalaciones de esta naturaleza para enfrentar los posibles casos, aunque se espera que con esta medida la cantidad de personas llevadas hacia centros de aislamiento se reduzca en alrededor de un 50 %.
Durante la reunión también trascendió que, desde el martes, los profesionales de la Salud en contacto directo con positivos a la COVID-19 comenzarán a trabajar como en etapas anteriores, en turnos de dos semanas y, al término de ese tiempo, deberán mantener una cuarentena.
Las instalaciones hoteleras de la cadena Islazul, que en otro momento fueron habilitadas, como Lido, Terrazas, Bella Habana y San Alejandro, volverán a prestar estos servicios. (Yudy Castro Morales)