Londres, 27 mar.— Una decena de instalaciones del Reino Unido podrían convertirse en hospitales temporales similares al que se habilita hoy en un centro de exposiciones del este de Londres, para atender a personas contagiadas por la Covid-19.
Según informó este jueves la cadena Sky News, que citó fuentes del gobierno británico, proyectistas militares están trabajando con el departamento de Salud y Atención Social en la localización de los lugares.
Aunque no ofreció detalles, la televisora apuntó que los nuevos centros de salud temporales podrían estar ubicados no solo en Londres, sino también en otras grandes ciudades como Manchester, Birmingham y Newcastle.
El martes pasado, el ministro de Salud, Matt Hancock, anunció que el Centro de Exposiciones Excel London se convertirá a partir de la semana próxima en el hospital NHS Nightingale, con capacidad para cuatro mil camas.
El Sistema Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido está a punto de colapsar ante el incremento casi exponencial en el número de pacientes afectados por el nuevo coronavirus, que hasta la tarde de ayer había contagiado a nueve mil 529 personas, de las cuales 463 fallecieron.
La falta de personal obligó a las autoridades a solicitar la reincorporación de los trabajadores de la salud jubilados, y a pedir el apoyo de 250 mil voluntarios para asistir a un millón y medio de personas vulnerables a las que se le pidió permanecer en sus casas para evitar el contagio.
Según confirmó la víspera el primer ministro Boris Johnson, más de 11 mil médicos y enfermeras en situación de retiro ya respondieron a la convocatoria, mientras que más de medio millón se ofreció para repartir alimentos y medicinas a los grupos de riesgo.
El jefe médico para Inglaterra y Gales, y principal asesor de Johnson para temas de Salud, Chris Witty, admitió, por su parte, que el Reino Unido no dispone de pruebas diagnósticos suficientes para detectar el nuevo coronavirus.
Al respecto, el editor de la prestigiosa revista científica The Lancet, Richard Horton, aseguró que el gobierno desatendió las alertas tempranas sobre la gravedad de la epidemia que llegaban desde China, y no se preparó a tiempo para enfrentarla.
En un intento de contener la propagación del virus, el gobernante decretó el lunes pasado fuertes medidas de confinamiento para la población, y autorizó a la Policía a imponer multas y a disolver reuniones públicas de más de dos personas.
Tras suspender las clases y cerrar bares, restaurantes y otros lugares de ocio desde la semana pasada, Johnson advirtió que solo se podrá salir de la casa para comprar alimentos o medicinas, realizar ejercicios físicos una vez al día de forma individual o acompañado por un familiar, o en caso de una emergencia médica o para asistir a una persona vulnerable.
En el caso de los trabajadores, solo aquellos que no puedan hacerlo desde casa, o que sean indispensables, están autorizados a trasladarse desde y hacia sus puestos de trabajo.
