Santiago de Cuba, 9 ene.— El 2019 fue un año importante en el progreso de la cultura santiaguera, porque a pesar de las dificultades económicas y energéticas, en los últimos meses los trabajadores del sector se crecieron y realizaron todas las actividades y festivales programados para el disfrute de la población y ratificaron su compromiso con Cuba y la Revolución.
Así lo valoró Raulicer García, director provincial de Cultura, en el balance anual correspondiente a 2019, presidido por Guillermo Solenzal, viceministro del ramo.
García reconoció el valor de la integración y del intercambio permanente con otras instituciones culturales como la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) y la Asociación Hermanos Saíz (AHS), para lograr mejor calidad en los eventos y mayor concurrencia de público, que, en definitiva, es el objetivo de su trabajo.
También resaltó el trabajo en la reanimación constructiva de algunas instituciones culturales, tanto en la cabecera provincial como en los municipios, lo que se traduce en mejores condiciones para los creadores y en un mejor servicio al público.
Para los artistas de Santiago de Cuba, la implementación y cumplimiento de la política cultural es y debe ser la premisa que nos permita definir el 2019 como un año exitoso, pese a los escollos que enfrentamos en el camino y que lejos de amilanarnos sirvieron de acicate para ganar en la calidad del trabajo, aseguró Yasmany Liens, presidente del Consejo de Artes Escénicas.
Liens, llamó la atención sobre la guerra cultural y de símbolos que financia y asesora el gobierno de los Estados Unidos, con el propósito de destruir a la Revolución Cubana, al tiempo que enfatizó en la necesidad perenne de preservar y defender la cultura y la identidad, porque es la única forma de proteger a la nación.
Fátima Patterson, Premio Nacional de Teatro 2017, enfatizó en la urgencia que se tiene de productos y propuestas culturales para engrandecer el pensamiento de todas las personas, pero particularmente en los jóvenes, sin embargo, aún son insuficientes los estudios relacionados con los procesos participativos y de consumo cultural que contribuyan al perfeccionamiento de la programación.
La reconocida actriz subrayó, además, el rol del trabajo con la historia desde cualquier manifestación del arte, porque un pueblo sin memoria está condenado al fracaso, dijo.
«¡Me niego a la desmemoria, no nos lo podemos permitir, y mientras esté viva, lucharé para que no suceda!”, declaró.
Junto a los trabajadores santiagueros de la cultura, en el salón Marquesina del Teatro Heredia, estuvieron los miembros del Comité Central Lázaro Expósito y Beatriz Johnson, primer secretario del Partido Comunista de Cuba, y presidenta de la Asamblea del Poder Popular en el territorio, respectivamente. Por Beatriz Vaillant Rodríguez
