Naciones Unidas, 5 nov.ā La Asamblea General de la ONU ha manifestado su rechazo al bloqueo de Estados Unidos contra Cuba durante 27 aƱos consecutivos, y reclama la urgencia de ponerle fin a ese mecanismo que aparece como el principal obstĆ”culo para el desarrollo de la isla caribeƱa.
A partir de la primera votación realizada en 1992, los Estados miembros del organismo multilateral -con excepción de dos o tres, según han transcurrido los años- expresan por medio de una resolución su oposición al cerco norteamericano.
En el debate de alto nivel de este aƱo en la Asamblea, mĆ”s de 40 paĆses manifestaron explĆcitamente su condena al bloqueo estadounidense y expresaron solidaridad con Cuba al intervenir en la magna cita, que se celebró del 24 al 30 de septiembre.
De acuerdo con cifras de la misión de Cuba ante Naciones Unidas, 43 Estados de diferentes continentes pidieron el levantamiento del bloqueo impuesto hace casi seis dĆ©cadas por Washington, el cual ocasionó daƱos por valor de 922 mil 630 millones dólares en ese perĆodo.
Por su parte, el canciller cubano Bruno RodrĆguez recordó en su discurso en el debate general que durante los Ćŗltimos meses, Estados Unidos inició la aplicación de medidas criminales, no convencionales, para impedir el abastecimiento de combustible a la nación caribeƱa desde diversos mercados.
En este último año, explicó, el Gobierno norteamericano aumentó sus acciones de hostilidad y bloqueo: impuso escollos adicionales al comercio exterior e incrementó «la persecución de nuestras relaciones bancario-financieras con el resto del mundo».
Ha limitado en extremo los viajes y cualquier interacción entre ambos pueblos. Obstaculiza los vĆnculos y contactos con su patria de los cubanos que viven en Estados Unidos, seƱaló el jefe de la diplomacia cubana.
La ilegal Ley Helms-Burton de 1996, cuyo TĆtulo III Washington decidió activar este aƱo, guĆa esa conducta agresiva, recalcó.
Casi seis dĆ©cadas de bloqueo norteamericano han provocado perjuicios cuantificables por mĆ”s de 922 mil 630 millones de dólares, pero los daƱos humanos que produce esta polĆtica genocida son incalculables, dijo el canciller recientemente por medio de su cuenta oficial en Twitter.
«El sufrimiento causado a las familias cubanas no puede contabilizarse», indicó.
LEY HELMS-BURTON, MĆS HOSTILIDAD DE EE.UU. HACIA CUBA
Desde su entrada en vigor en 1996, la Ley Helms-Burton procura universalizar el bloqueo mediante presiones brutales e ilegales contra terceros paĆses, sus gobiernos y empresas. AsĆ explicó la representante permanente alterna de Cuba ante la ONU, Ana Silvia RodrĆguez.
Con esa ley, el Gobierno norteamericano persigue asfixiar a la isla y promover las carencias de la población con el propósito de imponer un gobierno que responda a sus intereses, apuntó.
De acuerdo con la embajadora, la Helms-Burton y la activación de sus tĆtulos III y IV es el fundamental instrumento polĆtico y legal de la actual agresividad estadounidense.
Asimismo, destacó su marcada pretensión extraterritorial, al someter a ciudadanos e instituciones de terceros paĆses a la jurisdicción de las Cortes de Estados Unidos por acciones legĆtimas ocurridas fuera de su territorio.
La misión de Cuba ante la ONU publica regularmente comunicados con detalles del aumento del carÔcter extraterritorial del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra la isla caribeña.
Son muchos los ejemplos de la aplicación extraterritorial del bloqueo, recrudecido con la decisión del Gobierno de Washington que permite -al amparo del TĆtulo III de la Ley Helms-Burton- la posibilidad de tomar acción judicial
en tribunales norteamericanos contra entidades que trabajen con propiedades nacionalizadas en la dƩcada de 1960, resaltaron.
Esta disposición, expusieron, ataca la libertad de comercio y refuerza el carÔcter extraterritorial de las sanciones contra Cuba, ademÔs de dañar las relaciones económicas y comerciales de la isla con la comunidad internacional.
«La Ley Helms-Burton, violatoria de principios del Derecho Internacional como la libre determinación de los pueblos, la libertad de comercio, la igualdad soberana y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados, es totalmente inaplicable en Cuba.»
En ese sentido, la misión recordó la Ley 80 de Reafirmación de la Dignidad y SoberanĆa Cubanas, aprobada por la Asamblea Nacional del Poder Popular en diciembre de 1996, la cual declara ilĆcita la mencionada normativa estadounidense y sin valor ni efecto jurĆdico alguno en la isla.
TambiĆ©n el relator especial del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas sobre el impacto adverso de las medidas coercitivas unilaterales, Idriss Jazairy, se refirió a cómo la activación de los tĆtulos III y IV de la Ley Helms-Burton socava las perspectivas económicas de Cuba y causa un grave impacto en el pueblo de la isla.
SegĆŗn expuso a Prensa Latina por medio de una entrevista vĆa correo electrónico, el TĆtulo III abre la posibilidad de litigios desde territorio norteamericano contra empresas que hacen negocios en Cuba, y esto afecta aĆŗn mĆ”s el desarrollo general de la isla e impacta de forma negativa en su población.
El TĆtulo IV tiene por objeto intensificar todos los impedimentos para el ingreso a los Estados Unidos de aquellos directivos de empresas, y sus familiares, que invierten legalmente en Cuba, en propiedades que fueron nacionalizadas de conformidad con el Derecho Internacional.
Hasta la fecha, el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba aparece como el sistema de sanciones unilaterales mĆ”s injusto, severo y prolongado que se aplica contra paĆs alguno.
Pese a que desde 1992 la Asamblea General de la ONU ha aprobado cada aƱo una resolución que pide el fin de ese cerco, Washington sigue desoyendo a la comunidad internacional, y mantiene y recrudece su polĆtica hostil.
Por Ibis Frade *Corresponsal de Prensa Latina en Naciones Unidas.