La Habana, 26 jun.— La aprobación por la Cámara de Representantes de los Estados Unidos dentro del presupuesto para el año 2020 de un paquete de gastos que incluye 20 millones de dólares para la «promoción de la democracia en Cuba», vuelve a confirmar los planes agresivos de la clase gobernante de ese país con respecto a su vecino caribeño, que incluyen todos los estamentos ya sea del gobierno, el Congreso y otras instituciones.
De esta cifra 12 millones 973 mil serán para Radio y TV Martí, aún cuando investigaciones de organismos del propio «establishment» y la opinión generalizada de expertos independientes, han demostrado que ambos medios gubernamentales han sido altamente ineficaces y su labor ha estado plagada de corrupción y politiquería.
El gasto, aprobado este 19 de junio, cubriría el año fiscal 2020, que se extiende desde el 1 de octubre de 2019 hasta el 30 de septiembre de 2020.
Los fondos aparecen bajo el Fondo de Apoyo Económico y están dirigidos a “iniciativas de construcción de democracia, derechos humanos y sociedad civil en Cuba”, aseguró cubadebate.cu.
El Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes incluyó una solicitud al Secretario de Estado para que propicie la retirada de los diplomáticos estadounidenses de la Embajada de La Habana.
Desde mayo de 2018, los informes de un supuesto ataque acústico que había lesionado al personal norteamericano en La Habana llevaron a una reducción drástica del personal que trabaja en la embajada, desde entonces los ciudadanos cubanos interesados en adquirir una visa para los Estados Unidos deben realizar dichos trámites en Consulados de terceros países.
El Departamento de Estado y la Agencia para el Desarrollo Internacional informan que gastaron $ 22 millones 093 mil 043 en proyectos relacionados con Cuba desde que Donald Trump asumió el cargo en enero de 2017, informa cubadebate.cu.
El presupuesto que dedica la administración Trump a desestabilizar el gobierno cubano será dedicado a “promover el respeto por los derechos humanos y apoyar a los activistas de derechos humanos e identificar y comprometer a la próxima generación de líderes de la sociedad civil cubana”, aseguró dicho sitio de noticias.
A pesar de los progresos de los últimos años en las relaciones Cuba-EE.UU., que demostraron lo posible y beneficiosa que resultaba la convivencia entre ambos gobiernos, hoy se vive un endurecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por EE.UU. contra Cuba.
Esta resolución de la Cámara de Representantes, con el número 2839, debe ser aprobada por el Senado y firmada por el presidente antes de que se convierta en ley.
Su puesta en vigor sería otro elemento más en la política agresiva contra Cuba, que ha sumado desde el dos de mayo una intensificación, a partir de la aprobación del Título III de la Ley Helms-Burton y el establecimiento de demandas judiciales en cortes de EE.UU. contra empresas nacionales y compañías extranjeras radicadas en la mayor de las Antillas, más limitaciones en la política de viajes de sus ciudadanos, prohibición a cruceros y otras embarcaciones y a aeronaves que toquen puertos y aeropuertos cubanos, y la inclusión del país caribeño en la peor categoría en el informe del Departamento de Estado sobre la trata de personas, entre otros. (Mario Miguel Rodríguez Martínez, estudiante de Periodismo)
