Santiago de Cuba, 11 oct.— El Centro Histórico, corazón de la ciudad, es uno de los entornos que recibirá los aires de un enero jubiloso. La Plaza de Armas, hoy Parque Céspedes, sitio desde el cual Fidel Castro proclamó el triunfo de la Revolución Cubana, mejorará su imagen a escala urbana.
Ramón Cobas Avivar, Director adjunto de la Oficina del Conservador de la Ciudad (OCC), señaló que próximamente se trabajará en la pavimentación del área, el cambio de luminarias, el sistema eléctrico, señaléticas y, en el edificio del otrora Ayuntamiento, entre otras áreas de interés.
El Parque Céspedes, es la plaza de mayor jerarquía del Centro Histórico Urbano. Este último, comprende 3,2 kilómetros cuadrados y desde el año 1978 fue declarado Monumento Nacional. Tal reconocimiento concibe una acción sistemática y constante de protección.
Los esfuerzos en materia de salvaguarda y conservación del patrimonio, encaminan una política de mantenimiento y conservación a cargo del Centro Provincial de Patrimonio Cultural, la Oficina Técnica de Monumentos y Sitios Históricos, así como la OCC.
Todo parte de investigaciones urbanísticas, históricas y científicas realizadas por un equipo de profesionales altamente calificados, a criterio del arquitecto Omar López, Conservador de la Ciudad.
La esencia de una urbe dinámica, atractiva y moderna, también debe sus atributos al pueblo, aseveró el especialista. El trabajo creador toca a instituciones socioculturales, económicas y de los servicios, dijo el funcionario. Es por eso que junto a la OCC, laboran armónicamente el Plan Maestro y el Gobierno.
Y esa es la esencia de la oficina, unir las fuerzas para lograr resultados a largo plazo, para que la gente se sienta identificada con todo lo que se hace en pos de mejorar la calidad de vida de la población, argumenta López.
Actualmente se multiplican los trabajos de mantenimiento en el paseo Marítimo, el Corredor Patrimonial Las Enramadas, Plaza de Marte, el Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia y los proyectos de colaboración Internacional, Los Caminos del Café y en el poblado El Cobre.
Santiago de Cuba no se detiene en su andar. La villa que desde 1515 edifica su forma, realza sus símbolos de identidad, prueba de su indiscutible labor en la salvaguarda de sus valores históricos, culturales y patrimoniales.