Contramaestre, Santiago de Cuba, 8 may.— Tal y como dispone el protocolo de enfrentamiento a la pandemia por Covid-19, el personal de la salud que ha trabajado en zonas de riesgo, debe permanecer en cuarentena antes de regresar a su familia. Un grupo de esos valerosos profesionales en el municipio Contramaestre ya está listo para ir al hogar donde le esperan ansiosos.
En la acogedora instalación del campismo popular Las Golondrinas, pasaron dos semanas de observación después de habérseles practicado los exámenes establecidos y del cual todos salieron con resultados negativos lo cual confirmó que están aptos para el tan añorado encuentro.
Esta es la primera nómina de profesionales de la salud que enfrentó la pandemia del Covid-19 en un centro de aislamiento del municipio santiaguero de Contramaestre. Allí atendieron a decenas de pacientes sospechosos de la enfermedad y revelan que sus experiencias fueron inolvidables.
Yurkian Safons, Licenciada en Optometría y Óptica refiere que en el centro hicieron todo lo que hiciera falta, terminaron contribuyendo con cada actividad en la que su aporte fue necesario. Allí estaban en función del trabajo y todo cuanto estuvo a su alcance lo pusieron en beneficio de los pacientes.
Luisa María Rodríguez, Licenciada en enfermería y Jefa de ese personal en la instalación para pacientes sospechosos, revela que el aplauso de las nueve de la noche era simplemente indescriptible. En muchas ocasiones los pacientes con sus iniciativas de amor y agradecimiento les sacaron las lagrimas, especialmente cuando eran dados de alta y antes de salir de la institución les expresaban muestras de gratitud y reconocimiento.
Casi están de vuelta a sus hogares y familia. Reciben el acompañamiento de las autoridades del municipio, pero sienten la lejanía de sus seres queridos como nunca antes. La joven fisioterapeuta Shanaia Enamorado Galán refiere que lo más difícil para ella ha sido separarse de su niña, una pequeña con la cual habla todas las noches y que se ha convertido en una fortaleza para poder seguir adelante a pesar del sacrificio que una tarea como esta entraña.
Otro equipo de profesionales los sustituye ahora en las labores de enfrentamiento al nuevo coronavirus, pero les queda la satisfacción del deber cumplido y el compromiso con la misión humanista de salvar vidas. No dudan en ofrecer su disposición para volver a plantarle cara a la pandemia que mantiene en vilo a la humanidad.
Gracias a la labor de estos y otros profesionales del sector de la salud, Contramaestre muestra una situación favorable en la batalla al Covid-19. Ellos, desde la primera fila, aseguran la contención al nuevo coronavirus.