Hoy 24 de febrero se conmemoran 130 años del reinicio de las guerras por la independencia de Cuba. Recordamos un capítulo crucial en la historia de Cuba: la Guerra del 95, también conocida como la Guerra Necesaria o la Guerra de Independencia de Cuba. Este conflicto no solo fue un llamado a la lucha por la soberanía de la Isla, sino que también destacó el fervor y la determinación de un pueblo que anhelaba ser libre.
La Guerra del 95 fue el resultado de décadas de resistencia contra la dominación española. A finales del siglo XIX, Cuba había experimentado intentos anteriores de independencia, pero fue en 1895, bajo el liderazgo de figuras como José Martí, Máximo Gómez y Antonio Maceo, que el movimiento insurgente cobró una nueva vida. Martí, el apóstol de la independencia, regresó a Cuba con la firme convicción de que era hora de liberar a la patria del yugo colonial.
El 24 de febrero, en la zona de Baire, se produjeron los primeros levantamientos en la provincia de Oriente. Con el «Grito de Baire» comenzó una contienda que se extendería por tres años y que involucraría a miles de cubanos en una lucha épica por la libertad. La guerra no solo fue un enfrentamiento militar, sino también un esfuerzo por consolidar la identidad nacional cubana.
La Guerra del 95 sentó las bases para la futura independencia de Cuba. Hoy, más de un siglo después, el 24 de febrero sigue siendo una fecha emblemática que enciende el espíritu patriótico y la memoria de aquellos que lucharon por la libertad.
Recordar eventos como la Guerra del 95 no solo nos conecta con nuestro pasado, sino que también nos invita a reflexionar sobre el valor de la libertad y la autodeterminación. Cada año, al rendir homenaje a los héroes que forjaron el camino de la independencia cubana, reafirmamos nuestro compromiso con los ideales de justicia y soberanía que ellos representaron.
Hoy es un día para recordar y reflexionar sobre la valentía de nuestros antepasados. Que su lucha y sacrificio nos inspire a seguir trabajando por un futuro mejor para Cuba.