El proceso de bancarización y la Resolución 111/2023

El proceso de bancarización, a partir de las nuevas instrucciones aprobadas en la Resolución 111/2023, responde a soluciones imprescindibles, en la dinamización de las finanzas de los actores económicos estatales y no estatales y su relación con la población, en medio de circunstancias acuciantes para el encause oportuno de la nación cubana.

No basta conocer las afectaciones que ha venido ocasionando el bloqueo norteamericano en sus más de seis décadas de existencia y su recrudecimiento a la par y desde el embate de la pandemia, hasta los momentos actuales. Tampoco basta resistir, sin adoptar medidas vigorosas para contrarrestar los problemas y seguir batallando por una calidad de vida superior.

El proceso de bancarización, al igual que otras muchas medidas de orden económico y social, responde a tan preciado objetivo, porque para avanzar se necesita contar con suficientes recursos financieros en las diferentes operaciones, con incidencia importante en la población.

Tal y como reconoce la resolución 111/2023, el incremento del uso del efectivo en transacciones económicas y financieras venía provocando un retroceso de los niveles de bancarización e inclusión financiera en el país. A esto se añaden los elevados costos para su emisión, transportación, procesamiento y almacenaje, y la demanda creciente en el número de  cajeros automáticos para la extracción del efectivo

La medida lógica y necesaria que ahora exige este problema es incrementar la bancarización de las operaciones, a través de los canales electrónicos de pago y así hacer más ágil el proceso. Pero sucede que aun es lento y escaso su uso, a pesar de la amplitud de las vías establecidas y sus beneficios, y sucede no solo porque por naturaleza el ser humano se inserta poco a poco a los cambios, sino por falta de dominio en los procedimientos. En la medida que fluyan con efectividad todas las medidas se estabilizarán los diferentes servicios, incluido el de los cajeros.

En estos momentos las instituciones bancarias se empeñan en cumplir cabalmente lo establecido, tal y como sucede en la sucursal del Banco Popular de Ahorro 8292, ubicado en Aguilera entre Calvario y Reloj, en Santiago de Cuba, donde se realizan acciones de capacitación con los clientes para el uso de los diferentes canales electrónicos.

Mas, proceso al fin, no solo es responsabilidad del Sistema Bancario, también la ONAT desempeña un rol importante, por el necesario control y ajuste de obligaciones de los clientes. Los trabajadores por cuenta propia y las MYPIMES no están depositando el volumen requerido de sus  efectivos y eso crea serias afectaciones.

La obra erigida y ganada “a pantalones” recaba de inteligencia, comprensión, confianza y voluntad de vencer los problemas, por eso toca respuestas efectivas de los actores económicos estatales y no estatales, y de la población.