Holguín, 26 oct.— Como uno de los espacios más esperados en el contexto de la XXIX Fiesta de la Cultura Iberoamericana, el habitual pasacalle recorrió céntricas arterias de la ciudad de Holguín para mostrar lo más autóctono de los países invitados a la presente edición.
Desde el parque El Quijote hasta la Casa de Iberoamérica confluyeron, diversas culturas que, con originalidad y colorido, demostraron los fuertes lazos que integran a los pueblos de la región
Isaíris Rojas París, presidenta del Comité Organizador, en las palabras inaugurales, refirió que existen corrientes que desdeñan el valor de la vida, las tradiciones ancestrales y el derecho a la defensa de la identidad pero el arte verdadero es el símbolo de superación de diferencias de las culturas periféricas.
El talento de la localidad estuvo representado por los estudiantes de la enseñanza artística, además del trompetista estadounidense Leon Quincy, las compañías de flamenco Mónica Dance y Encuentro, y la Banda Provincial de Conciertos bajo la batuta de Daniel Sosa.
En esta ocasión llegó a Holguín, por vez primera, el proyecto Filitalia International, así como la Comunidad de Personas Albinas del Oriente de Cuba y un conjunto folclórico que, en representación de Chile, brindó al público uno de sus bailes tradicionales.
La compañía de danza contemporánea Codanza, el grupo La Campana y el proyecto «Fantasías», con acrobacias y variedades circenses, integraron el desfile que, también, contó con las interpretaciones de los grupos Azul Cima y Bella Voice.
Dedicada a los 30 años de fundada la Casa de Iberoamérica, la Fiesta rememora el encuentro de culturas que tuvo lugar a partir del desembarco del Gran Almirante Cristóbal Colón en la isla de Cuba, el 28 de octubre de 1492, por la bahía de Bariay, ubicada en el actual municipio holguinero de Rafael Freyre.
