Roma, 5 mar.— La primera ministra de Italia rechazó acusaciones sobre supuesta responsabilidad del gobierno italiano por el reciente naufragio de una embarcación en la región de Calabria, que causó la muerte a más de 60 inmigrantes, indican hoy medios de prensa.
En declaraciones a medios informativos, divulgadas hoy en la página digital del diario Giornale di Puglia, la mandataria alegó que es falsa la imputación de desatención por las autoridades migratorias de Italia a una alerta de inminente naufragio por parte de la Agencia Europea de Guardia de Fronteras y Costas (Frontex).
«No fuimos avisados de que esa embarcación corría el peligro de naufragar”, aseveró Meloni, a la vez que anunció que la próxima reunión de Consejo de ministros, en la cual se tratarán asuntos migratorios, se efectuará simbólicamente en la localidad de Cutro, de la provincia calabresa de Crotone, donde ocurrió la tragedia.
Piotr Switalski, portavoz de Frontex, señaló este domingo al diario Corriere de la Sera, que esa agencia hizo lo que le correspondía al informar de la presencia de la embarcación que navegaba rumbo a Italia en el mar Jónico «sin dar señales de peligro» pero con varias personas a bordo.
Por su parte otra vocera de esa entidad, Katarzyna Volkmann, declaró a ese diario que «la clasificación de un evento como búsqueda y rescate, según los estándares internacionales, corresponde a las autoridades nacionales» y por lo tanto, en este caso, a Italia.
En la madrugada del 26 de febrero último, naufragó frente a la playa crotonesa de Steccato di Cutro una embarcación de apenas 20 metros de eslora, con unos 180 migrantes a bordo, en su mayoría de Pakistán, Sri Lanka y Afganistán, quienes partieron tres días antes de las costas de Izmir, en Turkiye.
Solo sobrevivieron 79, mientras 69 perdieron la vida y aún los equipos de salvamento buscan a más de treinta desaparecidos.
Giuseppe Capoccia, fiscal provincial, dio a conocer que tras las primeras investigaciones se logró capturar a tres presuntos contrabandistas de personas, un ciudadano turco y dos pakistaníes, de ellos uno menor de edad, a quienes se les acusa de ayuda e instigación a la inmigración ilegal, naufragio culposo y homicidio involuntario.
En un comunicado divulgado en el sitio oficial de la Presidencia del Consejo de ministros a pocas horas del naufragio, Meloni expresó su “profundo pesar por las numerosas vidas humanas truncadas por los traficantes de personas”
Apuntó en esa nota que “es inhumano cambiar la vida de hombres, mujeres y niños por el precio del boleto pagado por ellos bajo la falsa perspectiva de un viaje seguro” y enfatizó, a partir de este caso, el objetivo de aplicar nuevas medidas para impedir las salidas.
