La labor y legado del pintor y patriota santiaguero José Bofill Cayol fue destacada en la Sala de Arte, de la urbe santiaguera, en homenaje al aniversario 160 de su natalicio.
Teresita Fleitas, historiadora del arte, expresó que este creador fue un excelente dibujante al carboncillo, como lo demuestra su primer plano de un barco surcando la bahía santiaguera y los retratos de personalidades, intelectuales, políticos y amigos.
Según manifestó, la brillante ejecución en la acuarela dotó al artista de admiración y reconocimiento entre los conocedores de la dificultad de esa técnica.
Afirmó que en las piezas se perciben paisajes rurales en ambientes bucólicos, personajes populares y el colorido de locaciones de su ciudad natal, de las cuales sobresalen Patio del viejo museo, Iglesia abandonada, Decrepitud e Interior del Morro, entre otras.
Comentó que Bofill se desempeñó también como taxidermista, miniaturista, decorador de escenario para los Juegos Florales e ilustró las revistas Oriente, Archipiélago y Actualidades.
El trabajo desarrollado en la dirección del Museo Municipal de Santiago de Cuba contribuyó a enriquecer y conservar la colección de la institución, así como a incentivar el interés por el arte y la historia en la población, dijo Fleitas.
Señaló que la pintura de este artista plástico constituye estímulo y legado para todas las generaciones, pues ejecutó sus obras con pasión, inculcándoles modestia, sensibilidad y honestidad.
José Bofill Cayol ( 27 de noviembre de 1862-20 de octubre de 1946) fue impulsor tenaz de la cultura en el territorio suroriental y mereció numerosos nombramientos y distinciones, entre ellos la medalla Enrique José Varona y la Orden de Mérito Náutico.
En su vida política se destacó su participación como enlace entre los grupos insurrectos en la Guerra de 1895, por la que sufrió persecución y destierro, así como el poner su talento en función de los intereses de la contienda patriótica, y ya en los tiempos de la república su labor junto al independentista Emilio Bacardí, primer alcalde que tuvo la ciudad y creador del primer museo y biblioteca que tuvo Cuba, y delque Boffill Cayol fue su director.
