La Habana, 17 feb.ā Puro arte: en el alma y hasta los huesos, con la pluma e igual con el fusil. Por eso se echaba al bolsillo el papelito que luego serĆa canciĆ³n, mientras combatĆa sin miedo, sin importar el cansancio o un disparo en el pecho, para lograr la Cuba libre que su generaciĆ³n, la del Centenario, soĆ±Ć³.
Es este 17 de febrero el aniversario 95 del natalicio de Juan Almeida Bosque, y vale recordarlo tal y como el Comandante en Jefe Fidel Castro lo describiĆ³ una vez: Ā«joven negro, obrero, combativo, que sucesivamente fue jefe de cĆ©lula revolucionaria, combatiente del Moncada, compaƱero de prisiĆ³n, capitĆ”n de pelotĆ³n desembarcando del Granma, oficial del EjĆ©rcito Rebelde, Comandante de Columna, marchando para crear el Tercer Frente Oriental, compaƱero que comparte la direcciĆ³n de nuestras fuerzas en las Ćŗltimas batallas victoriosas que derrocaron a la tiranĆaĀ».
TambiĆ©n vale evocar al hombre que, mientras crecĆa, le aumentaban las ganas de convertir en esperanzas todas las penurias y eliminar la discriminaciĆ³n de los barrios pobres donde viviĆ³, lo que lo llevĆ³ a sumarse a la lucha para transformar una sociedad que auguraba mĆ”s privaciones y vicios con el golpe de Estado de Fulgencio Batista, en 1952.
Y como esa lista sigue, hay que rememorar, especialmente, al cantor de la RevoluciĆ³n, a ese compositor de mĆŗsica y al autor de una docena de libros, entre ellos, Contra viento y marea, merecedor del Premio Casa de Las AmĆ©ricas, de 1985.
La vĆspera de su cumpleaƱos fue el momento preciso para rendirle homenaje, con la presencia del Primer Secretario del ComitĆ© Central del Partido y Presidente de la RepĆŗblica, Miguel DĆaz-Canel BermĆŗdez; los miembros del BurĆ³ PolĆtico, Esteban Lazo HernĆ”ndez, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular; Manuel Marrero Cruz, primer ministro, y el general de Cuerpo de EjĆ©rcito Ćlvaro LĆ³pez Miera, ministro de las far; asĆ como el Comandante de la RevoluciĆ³n Ramiro ValdĆ©s MenĆ©ndez, vice primer ministro, y el Comandante JosĆ© RamĆ³n Machado Ventura, y otras autoridades del Partido y del Gobierno.
La Sala Universal del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias se estremeciĆ³ al escuchar, mediante un audiovisual, el Ā”AquĆ no se rinde nadie!, en la propia voz de Almeida, frase suya tan legendaria como famosa su canciĆ³n La Lupe, que interpretĆ³ la compaƱĆa infantil La Colmenita.
Sobre su prolĆfera creaciĆ³n de piezas musicales, esas que incluso ahora tararean hasta los mĆ”s jĆ³venes, dijo Fidel que Almeida la ignoraba, no sabĆa que habĆa escrito mĆ”s de 300 canciones, las cuales sumĆ³ a su obra literaria.
Por ejemplo, en la memoria popular se coloca Dame un traguito, obra que cantĆ³ su hijo Juan Guillermo en la gala, a la que se sumaron muchas mĆ”s interpretaciones como A Santiago, El gran dĆa de enero y Mejor concluir. ()
