La Habana, 5 jul.ā El presidente de la Casa de las AmĆ©ricas, Abel Prieto, advirtiĆ³ hoy la intenciĆ³n del mandatario estadounidense, Donald Trump, de centrarse en una guerra cultural.
Trump prefiere centrarse en otra guerra, la cultural. En el discurso en el Monte Rushmore retratĆ³ a EE.UU. como un paĆs bajo el asalto de un ‘nuevo fascismo de extrema izquierda’, de ‘gente mala, diabĆ³lica’ cuya meta es ‘el fin de AmĆ©rica’, comentĆ³ el exministro de Cultura de Cuba en su perfil de Twitter.
El presidente de Estados Unidos aprovechĆ³ la vĆspera la celebraciĆ³n de la fiesta nacional del 4 de julio para brindar un discurso en el cual exacerbĆ³ al mĆ”ximo las divisiones polĆticas y prometiĆ³ una respuesta contundente contra el ‘nuevo fascismo de extrema izquierda’ que, segĆŗn Ć©l, se extiende por ‘escuelas, redacciones e incluso los despachos de juntas corporativas’.
A juicio de Trump, existe una supuesta ‘revoluciĆ³n cultural de izquierda diseƱada para derrocar la revoluciĆ³n americana’ y sus protagonistas son ‘gente mala, diabĆ³lica’ que busca no una AmĆ©rica mejor; sino ‘el fin de AmĆ©rica’.
Tales afirmaciones ocurrieron en el Monte Rushmore, ante una audiencia estimada de siete mil 500 personas, sin solicitar distancia social alguna, ni uso de mascarillas sanitarias, pese al apogeo de la pandemia de Covid-19 en Estados Unidos, una situaciĆ³n que el presidente ignorĆ³ por completo.
La Casa de las AmĆ©ricas recientemente conmemorĆ³ el 61 aniversario de su fundaciĆ³n y a propĆ³sito del festejo, Prieto dialogĆ³ con Prensa Latina sobre el aporte esencial de esa instituciĆ³n, a su criterio, el mantener viva la gran Patria Latinoamericana desde el punto de vista espiritual y cultural, por encima de las distintas circunstancias polĆticas.
TambiĆ©n hace unos dĆas, la Casa de las AmĆ©ricas exhortĆ³ a todas las personas de bien a levantar su voz para frenar el avance fascista y exigir el fin del racismo en Estados Unidos y todo el planeta.
El brutal asesinato de George Floyd y las muertes violentas de otros afroestadounidenses, infligidas en medio de las mayores protestas ciudadanas en mĆ”s de medio siglo, demuestran que el racismo en Estados Unidos funciona como una maquinaria mortĆfera, totalmente fuera de control, denunciĆ³ entonces la entidad en un comunicado.
Acostumbrado a dominar por medio de la fuerza y a no rendir cuentas por ello, el sistema es incapaz de controlar sus instintos primitivos, exacerbados desde la llegada de Donald Trump a la presidencia del paĆs, puntualiza el texto.
El comunicado concluye con un llamado a todas las personas de bien a levantar su voz para frenar el avance fascista, exigir el fin del racismo, la opresiĆ³n y la exclusiĆ³n social y reclamar igualdad y justicia para todas las vĆctimas de la discriminaciĆ³n y del odio en los Estados Unidos y todo el planeta, ahora y para siempre.
